El gobierno brasileño anunció recientemente un acuerdo con su par chino para llevar a cabo transacciones comerciales en sus respectivas monedas, sin la necesidad de utilizar dólares estadounidenses. Este nuevo sistema permitirá que las operaciones de comercio exterior o financiamiento entre ambos países se realicen convirtiendo el real brasileño a yuanes chinos, y viceversa, eludiendo la conversión a dólares, que es lo que suele suceder en las transacciones internacionales.
Este nuevo acuerdo supone una gran oportunidad para reducir los costos de las transacciones y fomentar aún más el comercio bilateral, además de facilitar las inversiones en Brasil. China es el principal socio comercial de Brasil, registrando un récord de USD 150.500 millones en 2022, con exportaciones brasileñas por USD 89.700 millones.
Durante la visita de las autoridades económicas de Brasil a China, se designaron dos bancos que harán posible estas operaciones: el Bank of Communications BBM y el Banco Industrial y Comercial de China. Es decir, por medio de estas entidades, los exportadores de ambos países recibirán los pagos en su respectiva moneda, eliminando la necesidad de utilizar una moneda intermediaria.
El acuerdo es opcional para las empresas, pero la exclusión de una moneda intermediaria “interesará” porque “representa menores costos”, según la secretaria de Asuntos Internacionales del Ministerio de Hacienda brasileño, Tatiana Rosito.
La medida se da en un contexto de creciente influencia de la economía china y la internacionalización del yuan. China busca reducir su dependencia del dólar y disputar la hegemonía económica con los Estados Unidos. Por lo tanto, este acuerdo se suma a otros acuerdos similares que China ha establecido con Rusia y Argentina en América Latina.
Brasil es también el principal destino de inversiones chinas en América Latina, con USD 70.300 millones entre 2007 y 2020, según el Consejo Empresarial Brasil-China. Por lo tanto, este acuerdo comercial en moneda local podría impulsar aún más las inversiones chinas en Brasil y mejorar la relación entre ambos países.
La visita a China formaba parte de la programación paralela a la visita oficial que realizaría el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva. Sin embargo, Lula da Silva canceló el viaje a última hora debido a una pulmonía.
En resumen, el acuerdo comercial en moneda local entre Brasil y China es una gran oportunidad para reducir costos y fomentar el comercio bilateral, además de facilitar las inversiones en Brasil. China busca reducir su dependencia del dólar y este acuerdo se suma a otros acuerdos similares que ha establecido con otros países, incluyendo Rusia y Argentina en América Latina. La exclusión de una moneda intermediaria puede resultar atractiva para las empresas y podría impulsar aún más las inversiones chinas en Brasil.