La nueva cepa del virus que se detectó en septiembre en Reino Unido, se ha esparcido en todo el país, dando lugar a nuevas restricciones. La alerta se ha difundido en diferentes partes del mundo y en especial, en Europa. Países Bajos, Bélgica, Italia, Austria, Islandia, Alemania, Francia y Bulgaria, hasta el momento han anunciado la suspensión de vuelos provenientes de dicho nación.
Esta habría sido detectada a inicios de septiembre. Para noviembre, ¼ de los casos ya eran de esta variante. En cuanto a diciembre, el aumento fue exponencial, ⅔ de los casos eran provenientes de esta cepa.
A pesar de ello, las mutaciones no son algo de extrañar, esto pasa todo el tiempo. El que se detectó por primera vez en Wuhan, no es el mismo que se esparció en la mayoría de países. La variante dominante en el mundo se originó en febrero, en Europa, que fue de allí donde empezó el contagio masivo. Posteriormente, en las vacaciones de verano en España, este sufrió de otra mutación.
Pese a que no es algo de extrañar, la alerta ha sido la peligrosidad de su transformación. El problema se centra en que la nueva cepa está reemplazando rápidamente a las otras. Esta tiene mayor rapidez en infectar células, es decir, esta nueva cepa es más contagiosa.
¿Qué sucederá con las vacunas?
La alerta se manifestó en medio de la aparición de las vacunas, sin embargo, no existen pruebas de que estas no puedan funcionar para esta nueva cepa. Las tres más avanzadas deberían funcionar para dicha transformación, afirman los científicos. No obstante, el peligro está en que continúen las mutaciones a tal punto que la vacuna no pueda proteger.
Estos cambios son bastantes usuales también en la gripe común, donde constantemente se realizan modificaciones a las vacunas, pues el virus cambia. Y con el avance de la ciencia, estas son rápidamente hechas.
Otro aspecto que se ha puesto en discusión es su mortalidad. Hasta el momento no está probado que sea más mortal, lo que si es que al contagiarse más rápido, el colapso de los hospitales será inminente.
Alerta en el mundo
A pesar de que no existe certeza absoluta sobre el peligro de la nueva variante, Reino Unido junto con otros países han decidido tomar medidas urgentes.
Boris Johnson, primer ministro británico, fortaleció las medidas de confinamiento. En las regiones del sureste de Inglaterra y Londres quedó prohibido las reuniones con personas que no vivieran en el mismo hogar durante dos semanas. Además, ordenó el cierre de tiendas de servicios y productos no esenciales.
Alrededor de 40 países han tomado medidas restrictivas debido a este mismo tema.
En Francia, Alemania, Italia, Noruega, Dinamarca, los Países Bajos, Irlanda, Austria, Portugal, Suecia, Bélgica, Rumania, Finlandia, Suiza, República Checa, España, Estonia, Letonia, Lituania, Croacia, Macedonia y Albania han tomado medidas respecto a sus vuelos. Algunos con excepciones para el tráfico de mercancías.
Más allá de Europa, Turquía, Rusia, India, Israel, Irán, Marruecos, Argelia, Túnez y Kuwait, han suspendido también vuelos hacia Reino Unido. Por otro lado, Arabia Saudita y Omán han interrumpido todos los vuelos internacionales.
En América Latina, Argentina, Chile, El Salvador, Colombia y Perú, han establecido limitaciones. En este último, no se autorizará la llegada de vuelos directos o con escala provenientes del Reino Unido.