En un enorme operativo internacional contra el crimen organizado transnacional, se detuvieron 800 miembros de 300 organizaciones criminales que operaban en más de 100 países. Las autoridades policiales holandesas, suecas, el FBI estadounidense y la Policía Europea (Europol) trabajaron de manera conjunta e interceptaron comunicaciones que les permitieron llegar a los sospechosos.
Uno de los mega operativos más sofisticados
El vicerrector de operaciones de la Europol, Jean-Philippe Lecouffe, calificó esta intervención como «una de las más grandes y sofisticadas hasta la fecha». También, describió al operativo como un «éxito excepcional por parte de las autoridades de los Estados Unidos, Suecia, los Países Bajos, Australia, Nueva Zelanda y los demás miembros europeos del grupo operativo». Producto de la cooperación de 16 países, se incautaron más de 32 toneladas de drogas, incluidas cocaína, cannabis, anfetaminas y metanfetaminas. Las fuerzas policiales también encontraron 250 armas de fuego, 55 autos de lujo y más de 148 millones de dólares en efectivo y criptomonedas.
Este trabajo surgió luego de que la agencia estadounidense se infiltrara en sistemas similares denominados «Phantom Secure» y «Sky Global», con lo cual accedieron a las comunicaciones de miles de usuarios, incluyendo sospechosos de crímenes. «El cierre de esas dos plataformas cifradas de comunicación creó un vacío importante en el mercado de las comunicaciones encriptadas», señalo la policía de Nueva Zelanda.
El FBI interceptó las comunicaciones
Para alcanzar el objetivo, el trabajo del FBI inició hace 3 años. Luego de infiltrarse en los sistemas de comunicación encriptada «Phantom Secure» y «Sky Global», se pudo acceder a las comunicaciones de miles de usuarios. En base a ello, la agencia estadounidense desarrolló una app que cumpliría una función similar a las anteriores, pero permitiendo a las autoridades monitorear las comunicaciones. En el transcurso de 18 meses, se instaló la app móvil a celulares que un grupo de intermediarios entregó a más de 300 pandillas.
Tras el cierre de «Phantom Secure» y «Sky Global», se generó un vacío que los intermediarios enviados por el FBI intentarían cubrir. A los miembros de las organizaciones criminales se les hizo creer que los teléfonos habían sido personalizados para eliminar el contenido de audio y cámara. De esa manera, pensaron que los celulares – realmente controlados por las autoridades – eran su única vía de comunicación segura. Tal como dijo la policía de Nueva Zelanda, «el cierre de esas dos plataformas cifradas de comunicación creó un vacío importante en el mercado de las comunicaciones encriptadas».
Calvin Shivers, de la División de Investigación Criminal del FBI, detalló la información que obtuvieron al interceptar los teléfonos celulares. Shivers declaró: «Hemos estado en los bolsillos traseros del crimen organizado. De lo único que hablan es de drogas, violencia, golpes entre ellos, personas inocentes que van a ser asesinadas».
¿Cómo se desarrolló el operativo?