Este lunes, después de seis meses, Ecuador inicia una nueva semana dando fin al Estado de excepción. El Comité de Operaciones de Emergencias (COE), en consulta con la Corte Constitucional, definió la terminación de las medidas más severas. Se ha eliminado el toque de queda y las restricciones a las reuniones sociales.
Sin embargo, aún se mantiene vigente la emergencia sanitaria. Esto quiere decir, que las normas de bioseguridad como el uso de las mascarillas, el distanciamiento físico entre las personas y el lavado frecuente de manos, continúan. Asimismo, las concentraciones en lugares públicos se encuentra prohibido, bares y discotecas estarán cerrados hasta una nueva disposición. De igual manera, gran parte de los municipios han decidido continuar con las restricciones vehiculares.
Por otro lado, se iniciaron medidas para ayudar a la reactivación del transporte aéreo y el turismo del país. Marco Subía, presidente de la Asociación de Representantes de Líneas Áreas del Ecuador, las señaló como adecuadas. Entre ellas, se destaca la presentación de un prueba RT-PCR negativa, que descarte la covid-19, como requisito para no ser puesto en cuarentena. Quienes no presenten la prueba y no tengan síntomas, ahora pasarán menos días en Aislamiento Preventivo Obligatorio (se redujo de 15 a 10 días). Y quienes tengan presente prueba negativa pero tengan síntomas, deberán pasar a cuarentena en uno de los hoteles autorizados por el COE.
El director del Sistema Integrado de Seguridad Ciudadana, Juan Zapata, apeló a la responsabilidad conjunta para afrontar la nueva fase. Remarcó que si se registra un aumento del contagio, las autoridades podrían decretar nuevos estados de excepción o toques de queda focalizados. Sin embargo, espera “no llegar a esos escenarios”.