Los resultados iniciales de una vacuna contra el COVID-19 desarrollada por la Universidad de Oxford (Reino Unido) sugieren que es segura e induce una respuesta inmune, así como que ha logradosu objetivo de generar una respuesta de anticuerpos dentro de los 28 días y el desarrollo de células T dentro de los 14 primeros días, según la revista de medicina The Lancet.
Del ensayo participaron 1,077 personas entre 18 y 55 años sin antecedentes de contagio del COVID-19 y tuvo lugar en cinco hospitales del Reino Unidos desde finales de abril hasta la última semana de mayo. Los participantes recibieron la vacuna del COVID-19 o la conjugada meningcócica, como grupo de control.
Al respecto, Andrew Pollard, profesor principal de la Universidad de Oxford y autor principal del estudio, señaló que «el sistema inmunitario tiene dos formas de encontrar y atacar a los patógenos: las respuestas de anticuerpos y de células T». En esta línea, aseguró que la intención de la vacuna en la cual se encuentra trabajando busca poder inducir ambas respuestas del sistema inmune, esto, con la finalidad de «que puede atacar al virus cuando está circulando en el cuerpo, así como a las células infectadas».
Asimismo, señaló que se tiene esperanza en que el sistema inmunitario pueda recordar al virus para proteger a las personas durante un periodo prolongado. No obstante, manifestó que se necesita «más investigación antes de poder confirmar que la vacuna protege eficazmente contra la infección».
Cabe precisar que no hubo eventos adversos graves relacionados con la vacuna; fatiga y dolor de cabeza fueron las reacciones más comúnmente reportadas. Otros efectos secundarios comunes incluyen dolor en el lugar de la inyección, dolor muscular, malestar general, escalofríos, sensación de fiebre y temperatura alta.
La vacuna es una de las 23 vacunas contra el COVID-19 actualmente en ensayos clínicos a nivel mundial, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).