El pasado lunes, un atentado terrorista que dejó a cuatro fallecidos y veintidós heridos, tuvo lugar en las calles de Viena. El gobierno austriaco decidió cerrar una Mezquita y una entidad denominada como “radical”.
El ministro del Interior, Karl Nehammer, y la Ministra de Integración Susanne Raab, anunciaron parte de las medidas que se tomaron como respuesta al atentado ocurrido. El servicio de inteligencia austriaco dio información sobre una mezquita donde el perpetrador del atentado se radicalizó. Además de una entidad que controla otro centro de rezo musulmán, ambas se calificaron como «radicales» por la inteligencia austriaca. Estas medidas se tomaron luego de consensuar con la Comunidad Musulmana de Austria.
“Esto no es un ataque contra la religión, sino una lucha contra el extremismo. No es un ataque contra sus miembros, sino una lucha conjunta contra el uso de la religión para la radicalización”.
Ministra de Integración, Susanne Raab, cuando anunció las medidas tomadas
¿Qué sucedió?
El día lunes pasado, en seis puntos diferentes de la ciudad de Viena, se dieron atentados terroristas que dejaron a 4 personas muertas y heridos a 22 más, muchos de gravedad. Entre los fallecidos se encontraba una mujer y un hombre de avanzada edad, una joven y una camarera que trabajaba en uno de los restaurantes de la zona.
El autor de estos crímenes fue identificado como Kujtim Fejzulai de 20 años, quien fue abatido 9 minutos después de que se iniciaran los ataques. El perpetrador utilizaba un chaleco explosivo (que luego resultó ser falso), un rifle de asalto y otras armas. Alrededor de las 20 horas comenzó a disparar contra varios ciudadanos que caminaban por las calles.
Uno de los atentados fue cerca de una sinagoga, pero no se sabe a certitud si esta era parte de un objetivo. Sin embargo, uno de los heridos es un agente que la custodiaba.
Redes terroristas en Europa
El atacante identificado era de origen albanés, sus padres eran de Macedonia del Norte, pero él tenía pasaporte austriaco. Sin embargo, tenía un interés activo con la ideología de ISIS.
La fiscalía informó a la agencia de noticias EPA que 6 personas fueron puestas en libertad – de 16 detenidos al momento del ataque-, ya que no se les encontró relación con el grupo yihadista. De los 10 detenidos restantes, 8 han sido puestos en prisión preventiva y los 2 restantes, aún no son enviados a prisión.
De la misma forma, Austria está trabajando en cooperación con Alemania y Suiza. En este último, hay dos detenidos relacionados con el ataque. En Alemania, la Policía Federal informó el día de ayer que está registrando las viviendas y oficinas de otras 4 personas que estarían vinculadas con el atacante de Viena.
ISIS reconoció la autoría de este atentado a través de su canal de propaganda en Telegram. Seguidamente, la agencia Amaq, quien es afín al grupo yihadista, publicó una fotografía del atacante, pero identificado con su nombre de guerra Abu Dayena al Albani. Posteriormente, la misma agencia publicó un video del atacante jurando lealtad al nuevo líder del ISIS, mientras sujetaba las armas con las que se presume, realizó el ataque terrorista.
Errores de la seguridad en Austria
El ministro de Interior, Nehammer, afirmó que se cometieron errores en la seguridad del país que le costaron la vida de los 4 fallecidos. El atacante ya tenía antecedentes de participación activa en el yihadismo. En abril de 2019 se le condenó a 22 meses de prisión porque quería ir a Siria para unirse en la lucha del Estado Islámico. Sin embargo, este salió en libertad condicional en diciembre de 2019, luego de recibir un programa de desradicalización.
La Ministra de Integración, Susanne Raab, afirmó que revisará los protocolos de los programas de desradicalización, puesto que el atacante los “engañó”.
El servicio de inteligencia también tuvo errores que le han costado a Austria. Eslovaquia, país limítrofe de Austria, informó al servicio secreto que el atacante intentó comprar municiones para un AK-47. Sin embargo, al momento de dar el aviso, no se identificaba al autor como presunto comprador.
El Ministro Nehammer anunció la destitución de un responsable en los servicios de inteligencia como respuesta a la negligencia. A estos cambios, se le unió que el canciller Sebastian Kurz, quien apartó temporalmente el jefe de la Agencia Contraterrorista, Erich Zwettler, producto de las investigaciones.