A un día de cumplirse 29 años de su captura, el genocida Abimael Guzmán Reynoso, falleció en el Centro de Reclusión de Máxima Seguridad de la Base Naval del Callao. La jefa del INPE, Susana Silva, comunicó a través de las redes oficiales de la institución la noticia de su deceso a las 6:40 am. Se dijo también que el cabecilla de Sendero Luminoso habría padecido fuertes dolencias los últimos meses.
Esta información conmocionó al Perú entero luego de que se emitiera el comunicado oficial. Los comentarios y declaraciones de diversas personalidades no se hicieron esperar, así como las múltiples teorías conspirativas. Por ello, aún existen muchos puntos por esclarecer respecto a su muerte.
El día que cayó «el cachetón»
Mañana, 12 de septiembre, se estarían cumpliendo 29 años de la captura de Abimael Guzmán, el cabecilla de la peor organización terrorista de América Latina. Si bien parece extraña la noticia de su deceso horas antes del aniversario de su aprehensión, si es preciso recordar cómo se vivió aquel 12 de septiembre de 1992.
Luego de una investigación organizada durante meses, el Grupo Especial de Inteligencia (Gein), capturó a Guzmán Reynoso en su residencia en el distrito de Surquillo. La Operación Victoria, nombre que le otorgaron a dicho operativo, tenia como finalidad encontrar con vida al presidente Gonzalo. Fueron las pistas y demás averiguaciones, las que les proporcionaron la dirección exacta de su paradero.
La operación estuvo presidida por el policía de inteligencia Benedicto Jiménez y, junto a él, estaban también los agentes Julio Becerra y Cecilia Garzón.
En este domicilio, Guzmán se venia escondiendo durante meses con absoluto éxito. Fue gracias al trabajo exhaustivo del GEIN que lograron ubicarlo junto a sus «camaradas». El grupo de élite antisubversivo creado por la Dirección Nacional Contra el Terrorismo (DIRCOTE), planeó meticulosamente esta captura, por lo tanto alrededor de 82 agentes participaron activamente aquel día.
29 años en prisión
Posterior a su captura, el líder senderista y sus fieles seguidores, fueron juzgados y condenado a cadena perpetua por el delito de terrorismo. Asimismo, Abimael fue trasladado al base Naval del Callao en donde estuvo cumpliendo su condena hasta el día de hoy. Cabe mencionar que, luego del incidente de Tarata, Guzmán Reynoso, recibió otra cadena perpetua por las muertes provocadas.
La Comisión de la Verdad y Reconciliación, le han atribuido alrededor de 30mil muertes durante las décadas en las que su organización del terror tuvo en sus manos el poder. El popular presidente Gonzalo, ha sido juzgado no solo en los tribunales, sino también por el pueblo peruano que clama justicia. Esto por los innumerable crímenes atroces cometidos por Sendero.
El inicio del fin
El deceso del presidente Gonzalo, alias que utilizaba a menudo, solo nos plantea una posible interrogante: ¿Será que a Sendero Luminoso por fin le llegó la hora?. Sin lugar a dudas, es una pregunta difícil de responder. Esto porque pese a que él era el ideario de los planes y atentados, el Perú aún no esta completamente libre de que alguien busque seguir sus pasos.
Solo es cuestión de tiempo para reconocer si estamos por fin siendo liberados de una burbuja que aún concentraba el sinsabor del terror que alguna vez causó sendero. Por supuesto que ningún peruano podrá olvidar los años de sufrimiento y dolor que Abimael Guzmán propició estando en vida. Es por eso que, es necesario estar vigilantes y evitar que figuras de poder del gobierno actual mantengan vínculos estrechos con asociaciones de índole similar.