El reciente predictamen elaborado por la Comisión de Salud sobre los medicamentos genéricos ha generado un profundo descontento y preocupación en diversos sectores. A través de un análisis exhaustivo de sus disposiciones, se revela una serie de falencias que comprometen gravemente la calidad y eficacia de la atención médica en el país.
Problemas estructurales
Desde el inicio, este documento exhibe una falta alarmante de fundamentos sólidos. Las definiciones propuestas resultan redundantes y confusas, evidenciando una ausencia de rigurosidad en su elaboración. Por ejemplo, el literal d) del artículo 2 propone una definición de «medicamento innovador» que entra en conflicto con normativas ya establecidas, generando una incoherencia normativa innecesaria.
LEE TAMBIÉN: Fredy Hinojosa Angulo, el nuevo vocero del Despacho Presidencial
Restricciones arbitrarias y libertades vulneradas
El predictamen también plantea una serie de restricciones arbitrarias que vulneran las libertades tanto de los establecimientos de salud como de los pacientes. El numeral 3.2 del artículo 3, que obliga a las farmacias privadas a mantener un stock mínimo del 30% de medicamentos genéricos en DCI, carece de fundamento analítico y limita la libertad de empresa y de contratación. Esta medida parece haber sido tomada sin un análisis detallado de su impacto en el mercado farmacéutico y en la accesibilidad de los pacientes a los medicamentos.
Desincentivo a la calidad y la innovación
Una de las disposiciones más preocupantes es la Tercera Disposición Complementaria Modificatoria, que propone modificar el artículo 234 del Código Penal, imponiendo penas privativas de libertad y multas a los fabricantes, importadores, distribuidores o comercializadores de productos farmacéuticos o dispositivos médicos que contribuyan al desabastecimiento o alza de precios. Sin embargo, esta incorporación no tiene sustento en el predictamen y podría desincentivar la inversión en investigación y desarrollo de medicamentos de calidad, perjudicando así a los pacientes a nivel nacional.
LEE TAMBIÉN: Se siguen asesinando guardabosques de las reservas peruanas
Desabastecimiento y descontento: Una realidad que se ignora
Las declaraciones del exministro Abel Salinas, quien señala al Ministerio de Salud como el gran responsable del desabastecimiento de medicamentos de calidad, subrayan la urgencia de abordar este problema de manera integral. Es evidente que el predictamen no ofrece soluciones efectivas para combatir esta situación, sino que más bien podría agravarla. La falta de sustento en las disposiciones del predictamen revela una preocupante desconexión con la realidad y las necesidades del sistema de salud peruano.
Es especialmente preocupante que ninguna de las disposiciones del predictamen obligue al Estado a exigir la acreditación de la calidad, seguridad y eficacia de los medicamentos que adquiere, y que son dispensados al 91% de la población asegurada. Esta omisión revela una total falta de consideración hacia un problema crucial en el sistema de salud peruano: el desabastecimiento de medicamentos de calidad. ¿Cómo se puede promover el acceso a tratamientos efectivos si no se garantiza la calidad de los medicamentos disponibles?
Un llamado a la reflexión y la rectificación
En resumen, el predictamen de la Comisión de Salud sobre los medicamentos genéricos carece de fundamentos sólidos y podría tener consecuencias nefastas para el sistema de salud peruano. Es imperativo que las autoridades revisen detenidamente estas disposiciones y trabajen en conjunto con los diferentes actores del sector para encontrar soluciones que verdaderamente promuevan la calidad, la seguridad y la eficacia en el acceso a los medicamentos. La falta de sustento en el predictamen es un claro indicador de la necesidad de un enfoque más riguroso y responsable en la elaboración de políticas públicas en materia de salud.