Un equipo derivado del Sexto Despacho de la Primera Fiscalía Anticorrupción de Lima realizó una nueva diligencia en las instalaciones de la Junta Nacional de Justicia (JNJ). En esta ocasión, se han incautado seis computadoras y discos duros por las investigaciones sobre contrataciones supuestamente irregulares de personal de dicha institución.
El fiscal Juan Carlos Zúñiga estuvo a cargo de esta intervención y señaló ante los medios de comunicación que esta diligencia se realizó porque el JNJ no entregó la información requerida.
«El siguiente paso es seguir recabando mayor información. Tomar conocimiento de dónde han estudiado los señores investigados, en qué universidad, pedir mayor documentación de su currículum, dónde han trabajado, toda clase de información que nos permita corroborar qué ha pasado y si ha habido una negociación incompatible o una entrega de documentos falsos. Eso es parte de la investigación», explicó.
El caso
Un informe periodístico del dominical Punto Final reveló la contratación de un grupo de abogados en la Dirección de Servicios Disciplinarios del JNJ que habrían modificado documentos para señalar que tienen experiencia en dicho tema.
Por ende, las diligencias de la fiscalía iniciaron el lunes y pasaron desde la sede de la institución hasta un gimnasio y una cevichería, ya que serían los lugares donde se emitieron estos documentos adulterados para que ingresen a trabajar estos integrantes al JNJ.
El reportaje periodístico señaló que los involucrados son Johan Castillo de la Cruz, Linda Castillo de la Cruz, Claudio Valdera Bohorquez, Rayan Calderón Bringas, Milena Aguilar Valle y Edson Villarroel Beraún. Todos ellos tienen como vínculo haber trabajado en la supuesta área legal del gimnasio «Milenium» y la cevichería «La tremenda corte».
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No pone trabas
Sin embargo, la JNJ se ha pronunciado respecto a las investigaciones del Ministerio Público, y alude que está brindando todas las facilidades del caso.
Asimismo, se refirió a la demora de las entregas de las computadoras precisando que dichos equipos podrían tener información de los procesos que se vienen llevando en la interna de la institución, por lo cual «se procedió a inmovilizar y lacrar esos equipos hasta que se dictara el mandato respectivo, como ha ocurrido hoy».
«La JNJ lamenta y rechaza con firmeza cualquier inconducta que pudiera producirse en su seno, adoptando todas las medidas legales a su alcance para el pleno esclarecimiento de los hechos», finaliza el documento.
