Una de las principales preocupaciones de la economía es reducir la cantidad de trabajadores del sector informal. Esto con el objetivo de lograr mejores condiciones laborales de más peruanos, mejorando así su calidad de vida. En la búsqueda de este objetivo, el nivel y calidad de la educación juegan un rol fundamental en la dotación de habilidades. Por lo que conocer el nivel de educación en el Perú podría ayudar a distinguir los avances en esta meta.
Educación en Latinoamérica
Si bien las economías latinas han dedicado esfuerzos para impulsar avances en los niveles educativos en los últimos años, de acuerdo al informe realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), aún persisten importantes desigualdades. De acuerdo al portal, Latinometrics según lo mencionado por la OIT, el 21% de profesores del nivel primario en Latinoamérica no tendrían un título del magisterio.
Además, como es el caso para México, el 66% de docentes de los niveles inicial y primaria que dictan clases en comunidades indígenas habrían dictado clases bajo esa condición. En cuanto a Brasil, solo el 21% de las personas entre 25 a 34 años tendrían un título superior en 2019. Y en una nota más positiva, el 37% de las mujeres chilenas en el mismo grupo de edad tenía una calificación superior, en comparación con el 30% de sus pares masculinos.
Educación en Perú
La Pandemia por el covid-19 dejó grandes rezagos en las diversas economías y Perú no fue ajeno a estas implicancias. La Educación Básica Regular que debería ser un derecho universal vio reducidas sus filas de asistentes. De acuerdo a información brindada por la Unicef, alrededor de 705 mil niños, niñas y adolescentes a nivel nacional abandonaron sus estudios escolares.
Parte es de esta desastrosa situación podría explicarse por la necesidad de las familias más pobres para conseguir ingresos. Quienes en su búsqueda de mejores condiciones retiran a los menores de sus centros educativos para ayudar en tareas del hogar o, en otros casos, insertarlos al mercado laboral.
Esta situación tendría implicancias negativas a futuro, tras la pérdida de dos años escolares. Estos estudiantes retirados podrían tener posibles pérdidas a largo plazo de alrededor de 80 mil soles. Esta situación no sólo afectaría la calidad de vida a futuro de estos estudiantes, sino que implicaría reducciones en el bienestar general de la economía.
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Informalidad y educación en el Perú
De acuerdo a un análisis realizado en el 2010 por Daniel Barco, Jefe del Departamento del Sector Real (2010), y Paola Vargas, Especialista de Crecimiento Económico del BCRP (2010), existiría una relación entre estos dos aspectos. Para realizar esta investigación, los autores tuvieron en cuenta que al mercado laboral peruano como uno de los más rígidos. Por ello, se consideraron altos costos laborales más no salariales (CTS, vacaciones, gratificaciones, pensiones y sistema de salud). Si bien la investigación realizada por los autores aborda diversos aspectos que influirían en la pertenencia al sector informal, se mostrará a continuación los resultados estrictamente ligados al nivel educativo.
Resultados principales:
- Los trabajadores que concluyen su formación secundaria y superior tienen mayores posibilidades de pertenecer al sector formal asalariado. Esto se explicaría por el aumento en la productividad de los trabajadores.
- En el caso de asalariado formal, tener un año más de educación incrementa los ingresos por hora en 9.3%.
- En el caso de independiente formal, tener un año más de educación incrementa los ingresos por hora en 8.2%.
- Por otro lado, los retornos a la educación son más bajos en el sector informal vs. el formal.
- Los trabajadores informales tendrían dos fuerzas opuestas para insertarse en actividades educativas.
Si bien los retornos en el sector formal son más altos que en el sector informal, aún estaban por debajo de otros países de la región. Lo cual podría estar explicado por la falta del uso intensivo de tecnología y actividades de alto valor agregado. Impulsar las mejoras en la educación no solo mejoraría la posibilidad de que las personas puedan acceder a un mercado laboral formal con mejores condiciones laborales. Sino que también mejoraría las actividades productivas del país impulsando la productividad en su conjunto.
Esto es un importante objetivo actual considerando que en el reciente informe publicado por el INEI, la población ocupada informal del país llegó a una cifra de 9.7 millones de personas en zonas urbanas julio 2021-junio 2022. Incentivar la mejora de la educación a nivel nacional otorgará mayores capacidades para que los futuros trabajadores puedan insertarse en el mercado laboral.