Los directores Daniels se imponen en la cartelera peruana con «Todo en todas partes al mismo tiempo». Una película donde Michelle Yeoh encarna a Evelyn, una mujer china-estadounidense que trasgrede su vida y explora los espejos de su personaje.
Los espejos de las historias
El cine incorpora un nuevo lenguaje donde los personajes se conectan con sus perfiles, realidades paralelas o posibles. El multiverso se impone en esta película con referencias de del cine de culto y las artes marciales en un formato dinámico. Rodado de manera artesanal y con códigos para que el espectador conecte sin complejos.
Utiliza el multiverso para definir al conjunto de los muchos universos existentes que afirman la existencia del nuestro.
La película se divide en tres partes: Everything, Everywhere y All at once. Su protagonista tiene la oportunidad de dejar la rutina para enfrentar a sus diferentes identidades que reflejan su multiverso.
La primera parte demuestra la rutina de una familia que trabaja en una lavandería y tiene una larga jornada de auditorías. Allí recibe el maltrato de quienes observan a los inmigrantes como unos buscavidas informales. Al enfrentar este prejuicio, Evelyn prepara la presentación de sus recibos y recibe la tensión de su marido, interpretado por Ke Huy Quan, quien le exige divorcio, sumando un problema más a su vida.
Sostenida en sus convicciones, la protagonista recibe la interpelación de sus padres y la vida aspiracional de su familia frente a una mala relación con su hija Joy, con la magnífica actuación de Stephanie Hsu.
La tediosa auditoría con la inspectora llamada Deirdre, con la impecable Jamie Lee Curtis, genera un desconcierto sobre la firme realidad de Evelyn, que a golpe de distracción decide escapar de su miserable realidad y cae en el Alphaverso. Esto e demuestra que tiene diferentes planos del multiverso que peligran frente a esta situación.
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Múltiples vidas para contar
Dentro de este universo, Evelyn descubre quien pone en peligro su vida. Sobre todo, aquellos que tienen la peor versión sobre su existencia y el uso de la tecnología del Alphaverso, que detecta los propósitos de los demás personajes en el multiverso.
La película permite insertarnos en la trama que sentimos como un dispositivo que nos conecta con los otros universos. Las habilidades en el manejo de las artes marciales de su personaje, su otro yo, su otra vida en un pasado, su multiverso del presente, hasta algunos hábitos alimenticios que son parte de su personalidad y que resuenan en su sentimiento del bien o en las malas experiencias que el mal tiene preparado para interponerse. Un cine de ciencia ficción que se mezcla entre iconos pop de artes marciales, comida chatarra, el barrio chino, lo bizarro y celebridades de la moda.
