Las empresas conforman uno de los agentes económicos más importantes junto a la familia y el Estado. Hay que tener en cuenta que la consolidación de ellas no nace de la noche a la mañana, ya que transcurren por un proceso de especialización. Por ello, tanto las micro como pequeñas empresas son fundamentales a largo plazo para aumentar la producción de bienes y servicios y, por ende, la competencia.
La pandemia, en sus inicios, fue un golpe muy fuerte para las mypes, aun siendo la principal pieza del sector privado peruano, según la INEI. Así, en 2020, se registraron aproximadamente 3.1 millones de ellas, un 48.8% menos que en 2019. El reflejo de la crisis es evidente.
¿Cuál fue la repercusión en el empleo?
Lo nombrado anteriormente tuvo una repercusión evidente en el trabajo y la informalidad, por lo cual los Mypes tuvieron 48,6% menos trabajadores que el año anterior empleando, esa forma, 4.5 millones, lo que significa un 26,6% de la población económicamente activa (PEA).
Presencia del Gobierno
El Gobierno central a través de un Decreto Supremo realizó 33 cambios al reglamento de contrataciones estatales para fomentar la participación de mypes.
Esto es el comienzo hacia la reactivación de tal sector. Tienen un gran reto para mejorar la viabilidad y competencia mediante políticas públicas, como la nombrada. No obstante, se debe tomar con cautela el gasto fiscal para evitar efectos nocivos a largo plazo en la económica del país.