Este lunes, el secretario de Estado, Mike Pompeo, anunció que su gobierno reingresaría a Cuba a la lista de países patrocinadores del terrorismo. “Con esta medida de nuevo hacemos responsable al gobierno de Cuba y mandamos un claro mensaje: el régimen castrista debe acabar con su apoyo al terrorismo internacional y con la subversión de la justicia estadounidense”, aclaró en un comunicado.
La medida se da hacia el final de la administración Trump y pondría en una difícil situación al próximo gobierno de Joe Biden. Esta acción interrumpe la política de acercamiento del gobierno americano con la isla que inició en 2015 con Barack Obama. Cuba compartirá la lista con países como Irán, Sudán, Siria y Corea del Norte.
Asimismo, el reingreso a tal relación estaría acompañado de una serie de sanciones: se le prohíbe exportar o vender armamento, además de una supervisión continúa de sus capacidades militares. Tampoco se podrá acceder a financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de otras instituciones financieras.
Diversos analistas internacionales han asegurado que la medida resultaría en un desincentivo para que los países y transnacionales decidan entablar relaciones con Cuba.
Al respecto, el canciller cubano Bruno Rodríguez se expresó en Twitter sobre la medida. “Condenamos la hipocresía y cínica calificación de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo, anunciada por EEUU”.