Después de más de siete horas de debate, el Senado de Estados Unidos confirmó a Amy Coney Barrett como jueza de la Corte Suprema (CS).
Con 52 votos a favor y 48 en contra, la nominada por el presidente Donald Trump, se convierte en la quinta mujer en ocupar una silla dentro del Tribunal Supremo americano.
Cabe recordar que Barrett sustituirá a la jueza liberal Ruth Bader, quien falleció recientemente. En contraste con Bader, ella es una católica conservadora y, por tanto, balancea el Tribunal Supremo a favor de quienes siguen dicha doctrina.
Su presencia ha generado polémica y angustia entre los jueces liberales, ya que su voto en contra de temas como el derecho al aborto y el matrimonio igualitario podría desfavorecer su agenda.
El partido republicano, liderado por Trump, ve la confirmación como una victoria a solo ocho días de las elecciones presidenciales que se disputan entre el mandatario y el exvicepresidente Joe Biden.