El gobierno de Chile reguló las restricciones a nivel nacional, que había sido impuesto por la pandemia, para celebrar las fiestas patrias durante tres días. El territorio chileno se encuentra en la fase más estricta de confinamiento por la covid-19, y la nueva medida consiste permitir las reuniones familiares por un tiempo limitado de 6 horas.
El Ministerio de Salud decretó un comunicado que a partir del 18 al 20 de septiembre la ciudadanía podrán solicitar una permiso a Carabineros para festejar libremente durante las fiestas patrias. La cantidad de visitas que podrán recibir cada familia, será máximo de 5 personas si se organiza en un espacio cerrado, y en lugares abiertos estarán permitidos hasta 10 visitantes como máximo.
Con respecto al toque de queda, empezará a las 11 de la noche y terminará a las 5 de la mañana, sin embargo a partir de las 9 de la noche estará prohibida la circulación social. Por otro lado, no se aceptará las reuniones populares donde frecuentemente se consume bebidas alcohólicas, comida y bailes grupales.
“Creemos que el mensaje que la medida transmite no es el adecuado”, señala a EL PAÍS el centro de estudios Espacio Público, que ha cumplido un papel central en la fiscalización de la estrategia oficial de la pandemia. “En el escenario actual, con diseminación comunitaria del virus y comunas en cuarentena donde la epidemia incluso se está expandiendo con fuerza (como Punta Arenas), el llamado debió ser a extremar las medidas de precaución para no exponerse a un potencial contagio”, señala Espacio Público. En esa línea, añaden, está el adelantamiento del toque de queda.
La decisión tomada por el gobierno chileno ha sido objetivo de críticas por diferentes alcaldes de distintas municipios de Chile. El partido oficialista RN, manifestó que las nuevas medidas impuestos por el estado tendrían consecuencias negativas para la población, “con este cambio se va todo al tacho”, se expresó Claudio Radonich y exigió al Ministerio de Salud que no se aplique en su ciudad que está situado en el sur del país.
El 25 de octubre se oficializará en la Constitución vigente de 1980, donde las personas contagiadas del nuevo coronavirus no podrán votar en las elecciones generales. Este sábado de registraron 1 961 nuevos casos y 57 muertos.