Guillermo Bermejo ha dejado el anonimato por sus polémicas declaraciones y férrea defensa no solo al gobierno sino también al líder del partido Perú Libre, Vladimir Cerrón. El parlamentario ha sido duramente cuestionado en el pasado por la frase “pelotudeces democráticas” durante un audio difundido por un canal de televisión.
Asimismo, lo más cuestionable del congresista de Perú Libre son sus nexos con remanentes de Sendero Luminoso. Bermejo, junto a Bellido e Iber Maravi son personajes estrechamente vinculados al terrorismo y de los cuales Perú Libre no pretende deslindar.
Esta semana, se supo de la existencia de correos electrónicos que agravarían la situación del denominado “Yemo”. En la siguiente nota, desarrollaremos todo lo referido a la incorporación de estos nuevos medios probatorios:
Remanentes del terrorismo: Cerrón y el camarada “Che”.
Guillermo Bermejo, congresista de Perú Libre asume un proceso penal en su contra por la presunta pertenencia y afiliación terrorista a los remanentes de Sendero Luminoso. De acuerdo con testigos protegidos, Bermejo se desplazaba de forma “consciente y voluntaria” a campamentos para reunirse con el terrorista Víctor Quispe Palomino, alias camarada José, y su hermano —muerto por heridas de combate en enero de 2021— Jorge Quispe Palomino, alias Raúl, entre el 2008 y marzo del 2009.
Asimismo, la fiscalía de Huánuco está a cargo de una investigación por presunto delito de terrorismo donde también han sido incluidos el fundador del partido de gobierno, Vladimir Cerrón y el congresista de Perú Libre, Guillermo Bermejo. Su incorporación a dicha investigación surge luego que un testigo sostuviera que estos habrían tenido cercanía con elementos terroristas.
El congresista aún debe responder por las acusaciones de terrorismo en el juicio oral en su contra que se viene desarrollando en el Poder Judicial. Hasta la fecha, se sabe que son cuatro los testigos que lo han señalado y ubicado en los campamentos terroristas. El testigo identificado con clave 1FP3006 reconoció a Guillermo Bermejo con el seudónimo de ‘camarada Che’, a quien acusó de haberlo visto en el campamento que tenía Sendero Luminoso en la zona de Huachinacpata, en el Vraem.
Bermejo: entre el “Che” y “Yemo”
Según fuentes de la unidad de investigación del Diario El Comercio, un informe de inteligencia mostraría los mensajes que Guillermo Bermejo intercambió en el 2008 con Javier Antonioni, informante de la Dircote que se comunicaba con el ahora parlamentario del oficialista Perú Libre.
“Yemo”, sería el apelativo con el cual los agentes de inteligencia denominaron a Bermejo en el informe policial. A través del correo electrónico plumayfusil@hotmail.com de pertenencia de Guillermo Bermejo, según el Atestado 001-2008-Dircote-Diviti, se comprueba la existencia de conversaciones sostenidas en el año 2008 con Javier Antonioni a quien el congresista identificaba con el nombre clave de “Olivia”. En dichas conversaciones se menciona “los gringos están que vienen y van”.
Ello en referencia, como se indica en el documento de inteligencia, al seguimiento que Bermejo realizaba de las tropas estadounidenses que en ese momento se encontraban en Ayacucho. Asimismo, señala: “Me reuní con los del frente 3 veces” y “TLC y otras cosas”, en alusión a encuentros con miembros del Frente de Defensa de Huanta por una campaña contra las tropas de Estados Unidos.
Además, ante una pregunta de ‘Olivia’ sobre el VRAE –en ese entonces todavía no se denominaba Vraem–, Bermejo responde que “quieren que me quede corto, pero estoy muy corto” y “la voz sería llegar a Pichari, hay un congreso de la coca el martes […] hasta el sábado”.
De acuerdo al informe de inteligencia, el ahora legislador se refiere a que debía contactarse con cocaleros de Pichari (Cusco, donde está la principal base militar en el Vraem) que estaban organizando un congreso que debía llevarse a cabo en los primeros días de agosto del 2008.
Por otra parte, desde un usuario que Bermejo denomina “no nos pueden comprar si no nos vendemos”, escribe: “Hay que trabajar los dos aspectos […] desde el campo electoral […] aquí está claro cuáles son las opciones”. Estos aluden a un planteamiento del ahora congresista para “trabajar una salida contra el sistema desde dos campos: el de la vía electoral hasta el de la lucha armada”, de acuerdo al informe de inteligencia.
El último miércoles, el coronel de la PNP Max Anhuamán Centeno, testigo de la procuraduría en el Caso Bermejo, declaró que el congresista oficialista “se comunicaba constantemente” con Javier Antonioni, una fuente de la policía que falleció el año pasado. Este informante les contó que Bermejo era el responsable del congreso bolivariano de los pueblos. “En una oportunidad nos comentó que él iba a viajar a Huanta para comunicarse con el comité de apoyo de Huamanga, que eran unos estudiantes. Eso motivó a que nosotros [los policías] nos desplazáramos junto con Bermejo en un transporte hasta la localidad de Huanta, Ayacucho”.
Un silencio «terrorífico»
“Guillermo Bermejo Rojas habría sido preparado militarmente por integrantes de las FARC-EP y como tal vendría preparando jóvenes en el uso y manejo de explosivos para la perpetración a futuro de atentado[s] terroristas”, según el informe policial antes citado.
Durante la campaña electoral de Pedro Castillo con miras a la segunda vuelta presidencial, Bermejo deslindaba de las acusaciones que recaían en su contra. Hoy, al ser consultado sobre estas últimas implicancias en el proceso penal seguido en su contra, el parlamentario ha guardado estricto silencio.
Junto a Bermejo, distintos personajes están vinculados al terrorismo. Si bien, ninguna condena se ha dado hasta el momento, la suma de sus investigaciones en miembros de Perú Libre, aún genera desconfianza. Aunque el oficialismo ha emitido mensajes con ínfulas democráticas, pero aún se sitúan entre gente que quería tomar el poder por la fuerza.