El presidente de la República enfrenta un caso mucho más grande que Lomas de Ilo del cual data del 2003, pero este sigue aún sin resolverse. En esta ocasión, Martin Vizcarra se habría beneficiado con el título de Director Ejecutivo del proyecto PG de Moquegua.
La Comisión Investigadora admitió una pesquisa sobre un presunto caso de corrupción dirigido por el mandatario. En este señala que se le imputa responsabilidad funcional, administrativa, civil y delictiva. El proyecto estuvo en manos del ingeniero a pocos meses de egresar de la carrera.
«Hay suficientes indicios razonables que determinan una responsabilidad funcional, administrativa, civil y delictiva de manera compartida en la que han incurrido los directores del proyecto especial Pasto Grande«, se expone en el texto.
Según informes, Vizcarra tiene responsabilidad delictiva por dicho proyecto, específicamente, por la obra Túnel Jachacuesta. Además, se cuestiona que la obra sobrepasó el monto estimado de 17 millones de dólares a 67 millones de dólares.
En esta línea, son tres personajes que resaltan en este caso: Martin Vizcarra, César Vizcarra (padre del actual mandatario) y Fernando Fuchs Valdez. También, actores implicados como Eloy Cabrera Ribote, Fernando Tantaleán, Guido Badoino, entre otros.
Declaraciones y contradicciones
Esta obra se presentó durante el gobierno de Alán García en el año 1988. Entonces, César Vizcarra, secretario general del APRA en Moquegua, le ofreció a su primogénito el cargo. Martin Vizcarra, con solo 25 años, dirigió una de las obras de irrigación más grandes de Moquegua: Proyecto Pasto Grande.
En el 2002, la Comisión Agraria abrió una investigación para «evaluar presuntos actos de corrupción de la década del 90 al 2000». Uno de los temas tocados fue la realización de proyectos importantes y la cooperación de autoridades que han tenido directa o indirectamente participación en estos hechos.
La comisión investigó una licitación del PPG que no se realizó por falta de estudios previos de ingeniería considerando insuficiente el realizado por el consorcio de Asesores Técnicos Asociados (ATA), del exministro de Agricultura, José Manuel Hernández.
Asimismo, la comisión citó a Martin Vizcarra para declarar en 2002 y 2003. La Comisión Agraria del 2002 dictaminó atribuciones de tipo penal al entonces Director Ejecutivo. En el 2003, una Comisión Investigadora citó al ex asesor del proyecto, Fernando Fuchs, para que declare toda esa información y sea corroborada.
En esta línea, el dominical Panorama reveló que Martin Vizcarra habría incurrido en contradicciones entre lo expuesto «en la comisión y la documentación recibida».
Irregularidades
El economista Fuchs manifestó a la Comisión del 2003 que Martín Vizcarra fue favorecido por César Vizcarra en el Proyecto Canto Grande. Por tanto, su padre habría manejado influencias que estaban ligadas al gobierno aprista de turno para facilitarle el cargo.
Además, Fernando Fuchs señaló que el padre del actual mandatario apadrinó a Agustín Mantilla en dicho proyecto. Luego, Mantilla nombraría prefecto a Vizcarra, quitándole así poder a Guido Badoino. En su momento, el APRA había nombrado a Guido como presidente de Cordep.
«Entonces Badoino estuvo en desacuerdo con el proyecto Pasto Grande. Contrató un magnífico ingeniero y nos hacía llegar cada semana observaciones al proyecto, diciendo que no tenía nivel técnico«, declaró Fuchs Valdez a la Comisión.
Asimismo, el ex asesor de Pasto Grande afirmó que Cabrera sabe que los estudios son un desastre. Además, Fuchs declaró una conspiración porque «los textos de Guido Badoino confirman que los estudios son simulados».
Luego de 13 años, el cuestionado Martin Vizcarra estaba a punto de ser oficializado como vicepresidente de la República. Ese mismo año, un fiscal de Moquegua abrió la investigación en su contra por el Túnel de Jachacuesta.
Ahora, se espera que los 5 testigos aspirantes a colaboradores puedan declarar sobre los presuntos sobornos que habría recibido el actual primer mandatario, Martin Vizcarra Cornejo, por la licitación del Proyecto Pasto Grande.