A cinco días de las Elecciones Generales del 2021 y en medio de un panorama de incertidumbre, luego de los ajustados resultados de los simulacros de votación revelados la última semana, la candidata Verónika Mendoza inició el cierre de su campaña con un discurso que busca consensuar en favor de los dos perfiles de votantes a los que actualmente apunta. Entre «una patria nueva» y la representación de diversas minorías, la líder de izquierda dio inicio al fin de su segunda campaña electoral.
Cabe destacar que Mendoza, aspirante a la Presidencia por Juntos por el Perú (JP), afronta actualmente un dilema entre acercarse a los votantes progresistas o insistir —como en el pasado— en conseguir el voto de un electorado de izquierda radical.
Este último mitin partidario tuvo lugar en la capital y continuará en provincias estratégicas en lo que resta previo a la prohibición de realizar mítines proselitistas impuesto por el Jurado Nacional de Elecciones.
La también excongresista resaltó la existencia de una campaña de desinformación y difamación en su contra, para lo que, insiste, sus seguidores deben responder dando a conocer sus iniciativas electorales. «Frente al odio, frente a la mentira, frente a la desinformación y los ataques, sigamos difundiendo propuestas, irradiando luz, amor y esperanza porque ese es el camino del cambio», dijo.
En esta línea, manifestó su gratitud a los simpatizantes y militantes de JP y respondió a quienes han señalado que la campaña de Mendoza es «millonaria». «Algunos han cuestionado que nuestra campaña es millonaria, y les decimos que sí, que nuestra campaña es millonaria en voluntades y corazones de gente valiente que se la juega», aseguró.
«Nosotros no luchamos por un carguito. Ahora tenemos la oportunidad histórica de por fin dejar atrás la corrupción, el entreguismo, la violencia y la discriminación y construir juntos una patria nueva que por fin nos acoja y nos abrace a todos», añadió.
En otro momento, Verónika Mendoza Frisch señaló que su candidatura busca representar a los trabajadores, los campesinos, los pueblos originarios y las mujeres luchadoras del pueblo peruano. «Vamos por un país en el que todos y todas podamos ser felices», puntualizó.
