Cuál monarca absoluto, Pedro Castillo tiene claro que ser la máxima autoridad tiene sus «beneficios». Es así, que no solo visitó su tierra natal para pasar Navidad, sino también, dispuso la modificación del DS N° 179-2021-PCM que regulaban las reuniones sociales y familiares. ¿El problema? La falta de difusión de dicha modificación y la contradicción que en principio significaba su visita a sus familiares en Navidad cuando miles de peruanos no podían hacerlo.
La incoherencia del gobierno
El pasado 9 de diciembre se publicó el DS N° 179-2021-PCM en El Peruano. Dicho decreto causó revuelo dentro de la sociedad peruana, puesto que especificaba en primera instancia que el toque de queda sería a las 11: 00 p.m. del 24 de diciembre, lo que significaba que no podríamos pasar Navidad en familia. El Minsa estableció en el artículo 4 que se prohibían «todo tipo de reunión y evento social, incluyendo las que se realizan en los domicilios y visitas familiares«.
Pese a esa restricción, el presidente Castillo hizo publico que iba a pasar la Navidad con sus padres dado que eran personas de edad avanzada. Sin embargo, esto significaba una contradicción. No se critica el hecho de que el jefe de Estado se reúna en familia para pasar la Navidad, sino lo que se juzga es que le niegue ese derecho a todos los demás. No es coherente que vaya en contra de la prohibición impuesta por su propio gobierno. Ante ello, hubieron numerosas críticas en contra del mandatario.
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Los privilegios de Castillo
Dicha medida que estuvo publicitada en todos los medios de comunicación solo tuvo efecto hasta la noche del jueves 23 de diciembre, cuando se publicó una modificación del artículo 4 mismo decreto. El cambio se realizó para que solo se prohíba «todo tipo de reunión y evento social», sin incluir las visitas de carácter familiar. Sin embargo, resulta contradictorio que, en esta última modificación, se cita al DS 184-2020, el cual, en su artículo 9, mantiene la prohibición de reuniones familiares en fiestas, específicamente en Navidad.
«El concepto de igualdad ante la ley significa que si el presidente puede (viajar a visitar a su familia en fiestas), los demás peruanos también deberían poder», dijo el analista político Gonzalo Zegarra.
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El secretismo
Miles de peruanos modificaron sus planes para poder, dentro de las limitaciones impuestas por el gobierno, pasar la Navidad con la misma calidez de años anteriores. Hasta la Nochebuena, los ciudadanos seguían creyendo en dicha medida. En un intento por pasar desapercibido, no hubo difusión oficial del citado cambio, ni aclaraciones sobre las contradicciones de dicha regulación. Ello generó confusión entre el personal de la Policía Nacional que se preparaba para ejercer el control y orden durante la celebración navideña.