A raíz de un nuevo pedido de vacancia contra el actual mandatario, el país continúa viviendo una crisis política. Esto supone una nueva querella entre el Ejecutivo y el Legislativo, que se suma a la emergencia sanitaria a causa del COVID -19. Esta sería la segunda moción presentada, un mes después de que se haya presentado la anterior.
La moción fue promovida por el partido UPP. Esta recibió el apoyo de los partidos Podemos, Frente Amplio, dos congresistas de Acción Popular y de un independiente. Se propone que con esta moción se declare la permanente incapacidad moral del presidente.
Cabe recalcar que estos dos pedidos de vacancia no son los únicos que se vienen suscitando en estos 3 últimos años. En este lapso el país ha encarado 4 pedidos de vacancia presidencial.
Primera moción de vacancia a PPK
Tuvo lugar en 2017, tras la revelación de que Pedro Pablo Kuczynski habría mantenido vínculos con Odebrecht. El nexo se habría dado a través de su empresa Westfield Capital y la de su exsocio Gerardo Sepúlveda, First Capital.
Según documentos remitidos a la comisión Lava Jato, la constructora brasileña Odebrecht habría realizado siete pagos ilícitos. Dichos pagos sumarían un total de USD 782 207 a Westfield Capital por consultorías. En tanto, First Capital habría recibido USD 4 043 941 por los mismos servicios.
Finalmente, PPK pudo superar este primer golpe, aseverando que no tuvo ciertos tratos con Odebrecht. Afirmó que fue su exsocio, Gerardo Sepúlveda, quien realizó dichos contratos, de los cuales nunca tuvo conocimiento. El jueves 21 de diciembre no se alcanzaron los votos necesarios para proseguir con la moción.
Segunda moción y renuncia de Kuczynski
El 8 de marzo del 2018 se presentó una nueva moción de vacancia multipartidaria contra PPK. En esta ocasión, debido a que se habían revelado pruebas que confirmaban su vínculo contractual y profesional con Odebrecht. Asimismo, fue acusado por mentir ante el Congreso, en tanto que no existían «barreras de comunicación» sobre las gestiones que realizaban las empresas en cuestión.
En las nuevas evidencias se hablaba de cinco visitas de Jorge Barata, ex director ejecutivo de Odebrecht en el Perú, a PPK. Estas ocurrieron cuando el expresidente fue ministro de Economía y, posteriormente, como presidente del Consejo de Ministros en el gobierno de Alejandro Toledo.
Por otro lado, se incluyen al menos dos visitas de Sepúlveda a la sede de la Presidencia del Consejo de Ministros. Ello entre septiembre y octubre del 2005. En tales fechas, el exmandatario era aún titular de la entidad. Sumado esto, la bancada de Fuerza Popular presentó audios protagonizados por el excongresista Moisés Mamani. En dicho material se aprecia que los exparlamentarios Kenji Fujimori, Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez ofrecen gestionar obras para votar en contra de la vacancia. Esta moción concluyó con la renuncia de PPK. El exmandatario recibió 36 meses de prisión preventiva por el Poder judicial; el entonces vicepresidente Vizcarra tomó el mando.
Vizcarra enfrenta la primera moción de vacancia
Del mismo modo que su antecesor, Martín Vizcarra podría ser vacado por la difusión de audios de conversaciones suyas con exfuncionarios de su entorno. En ellos se evidenciaría que los entonces funcionarios planeaban una estrategia de defensa respecto al tema del registro de visitas a Palacio de Gobierno. Este habría sido modificado para ocultar los ingresos de Richard Cisneros. Actualmente, Richard «Swing» es investigado por el Ministerio Público. Las sospechas surgirían respecto a los contratos con el Ministerio de Cultura entre el 2018 y 2020, por un monto ascendente a S/ 175 000.
La misma noche, tras la exhibición de los audios en el pleno del Congreso, Vizcarra argumentó que no había nada ilegal en su contenido. Señaló que lo ilegal fue la forma en que se grabaron. En su defensa admitió que, en efecto, era su voz en los audios, pero estos habían sido motivados por su exasistenta Karem Roca.
Vacancia contra Vizcarra y panorama actual
En esta ocasión, el pedido de destitución se respalda en los testimonios de cuatro aspirantes a colaboración eficaz. Estos afirman que Vizcarra recibió pagos ilícitos por un monto total de S/ 2 300 000. Estas dádivas habrían favorecido a los consorcios Obrainsa-Astaldi e ICCGSA-Incot con dos obras, cuando era gobernador regional de Moquegua. Por el momento, el Congreso ha acordado definir la admisión de vacancia del Jefe de Estado el 4 noviembre.
Análisis
En torno al último pedido de vacancia, Diario El Gobierno conversó con el analista político Gustavo Romero Umlauff. Él manifestó que le parece correcta la aplicación de la prerrogativa constitucional de vacancia presidencial para casos como los que afronta Vizcarra.
«Tenemos a un presidente totalmente deslegitimado, con una carencia de liderazgo, honestidad y dignidad, los cuales son elementos que caracterizan a un líder. Evidentemente, los pedidos de vacancia los genera el Congreso, pero la inestabilidad que generan estos procesos son de culpabilidad directa del jefe de Gobierno», afirmó.
Aunque Romero considere que «probablemente» la moción no prospere, recalcó que es primordial estar alerta a las próximas evidencias que se presenten. Esto, debido a que el proceso podría ser manchado por el interés de Vizcarra en «cubrir sus huellas».
Nos queda esperar a los próximos días para observar la resolución de la vacancia. Ella moldeará de manera evidente el futuro del país.