El Legislativo desaprobó la participación de Pedro Castillo Terrones en la edición 77 de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En dicha reunión internacional, el mandatario aseveró que las censuras e interpelaciones del Congreso retardan la labor del Ejecutivo. Además, a modo de victimización, arguyó que los golpes de Estado son ilegítimos porque «atentan contra la expresión soberana de la voluntad popular». Por ello, la Comisión de Relaciones Exteriores, presidida por la parlamentaria María del Carmen Alva Prieto, citó al canciller César Landa Arroyo, para que explicara la postura expresada por Castillo en el evento.
Landa negó que Castillo haya atribuido los golpes de Estado al Congreso. Asimismo, argumentó que ese mensaje presidencial forma parte de una postura principista. «A nivel internacional no hizo alusión al Congreso, sino a una posición de principios. Pues actualmente las Naciones Unidas reciben los discursos de los jefes de Estado en los que plantean posturas principistas que cada uno defiende», mencionó en relación a las declaraciones de Castillo.
En contraparte, la legisladora María del Carmen Alva catalogó como «penoso» que el jefe de Estado atacara al Poder Legislativo en la Asamblea General de las Naciones Unidas. «Estoy segura que todos los que han escuchado se han quedado impresionados de que un presidente vaya a hablar mal de su Congreso», comentó.
Canciller Landa defiende reconocimiento de la República Saharaui
En mayo de 1987 inició formalmente las relaciones diplomáticas entre las Repúblicas del Perú y Saharaui. Sin embargo, en setiembre de 1996, el Gobierno de Alberto Fujimori rompió el lazo internacional. La historia cambiaría luego de que Pedro Castillo asumiera la Presidencia. Mediante el Comunicado Oficial 17-21, ambas naciones acordaron el restablecimiento de relaciones diplomáticas.
Sin embargo, nuevamente hubo una ruptura del vínculo. Con la llegada Miguel Ángel Rodríguez Mackay a la Cancillería, se conoció que Perú y Saharaui decidieron no continuar con las tratativas. En la edición 77 de la Asamblea General de la ONU, sin embargo, el presidente Castillo informó que restablecieron relaciones diplomáticas con la República Araba Saharaui Democrática. Además, condenó la invasión de Rusia a Ucrania; reconoció la soberanía de Argentina en las Islas Malvinas y reprobó la toma de posición de Israel en territorios árabes y palestinos.
«Esta es la posición histórica que el Perú y su cancillería han mantenido desde entonces, y se ha ratificado con el discurso del presidente dado en el foro de las Naciones Unidas. Es la oportunidad no solo para el Perú, sino para cada país de establecer sus líneas principales en política exterior», alegó el canciller César Landa ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso.
Asimismo, el ministro Landa respaldó la iniciativa del Gobierno de Castillo al reconocer a Saharaui como república y al restablecer relaciones diplomáticas con esta nación. Incluso se refirió al principio de libre determinación de los pueblos y recordó que el jefe del Estado es quien dirige la política exterior. Pero María del Carmen Alva, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores, cuestionó la postura del canciller. «La República Saharaui son 40 carpas en un territorio de Argelia. No los reconocen los países árabes y nadie. (…) Son considerados nómades», espetó la acciopopulista.
Incluso la expresidenta del Congreso comentó que es un cliché que la política exterior esté dirigida por el presidente. «La Cancillería no está pintada, es la que da los lineamientos. Es evidente que el presidente no es que sepa de derecho internacional. No es posible que tengamos relaciones con la República Saharaui, que se suspendan y se rehagan. En un año tenemos tres cambios en la Cancillería»,zanjó.
El canciller Landa no cumplió con las expectativas de la oposición. Según el congresista Diego Bazán, existe una responsabilidad política del ministro Landa por las declaraciones de Castillo ante la ONU.
Interpelación
Las bancadas Renovación Popular y Avanza País están recolectando firmas para interpelar al canciller César Landa. Uno de los fundamentos es que la performance del presidente Castillo dejó un gran sinsabor en la Asamblea General de la ONU, puesto que el Congreso autorizó el viaje para exponer la política exterior de los peruanos, y no para tocar temas polémicos.
Renovación Popular consideró a César Landa como el corresponsable de las declaraciones del mandatario en el evento internacional. Asimismo, el parlamentario Jorge Montoya opinó que Castillo desestabilizó las relaciones del Perú en el exterior al referirse a la guerra entre Ucrania y Rusia y al caso de Las Malvinas. «No puede tener el descaro de dar un discurso diciendo que todo el Estado está infectado de corrupción dejando mal al país», agregó.