El presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, ha presentado ante el Congreso de la República un proyecto de ley de reforma constitucional; para poder convocar una nueva asamblea constituyente. La propuesta del Ejecutivo consiste en que, durante las próximas elecciones regionales y municipales de noviembre próximo, se incluya una cédula adicional. Donde se le pregunte a los ciudadanos si están de acuerdo con la convocatoria para una Asamblea Constituyente encargada de elaborar una nueva constitución para el Perú.
El oficio suscrito por el presidente Pedro Castillo y el jefe del Gabinete Ministerial, señala que, de aprobarse dicha solicitud. Se debe convocar a la ciudadanía para elegir a 130 miembros para integren una nueva Asamblea Constituyente con el fin de redactar una nueva constitución. Dichos representantes deben ser elegidos por voluntad popular y paridad de género, donde también participen diferentes civiles que no pertenezcan necesariamente alguna agrupación política; similar al caso de la nueva constituyente en Chile.
Las bancadas de Fuerza Popular, Renovación Popular, Avanza País, Alianza para el Progreso, Podemos Perú y un sector de Acción Popular, han mostrado su total rechazo a la solicitud del Ejecutivo. Mientras que las bancadas de Perú Libre, Juntos por el Perú y algunos diputados no alineados, han mostrado su respaldo a la propuesta de Castillo. La presidenta del Legislativo, María del Carmen Alva, aseveró que es muy probable que el proyecto no tenga éxito; debido a que primero debe ser aprobado por la Comisión de Constitución antes de pasar a debatirse en el pleno y los que integran esa comisión han indicado que no están de acuerdo con dicho proyecto de ley. «El ánimo de los congresistas no es cambiar las reglas del juego en este momento»; afirmó Alva Prieto.
La opinión pública tampoco considera que la convocatoria para una constituyente sea una prioridad para emprender en le presente quinquenio. Una reciente encuesta de la empresa IPSOS; donde señala las prioridades que debe llevar a cabo el Gobierno de Pedro Castillo son: la lucha contra la delincuencia (43%), la lucha contra la corrupción (42%), la reducción de la pobreza (25%), el control de la inflación y costo de vida (25%). Y como último punto la convocatoria a una nueva constitución (7%). Según Alfredo Torres, presidente de IPSOS Perú, el bajo porcentaje de los entrevistados a favor de una nueva Asamblea Constituyente; representa un sector politizado de la izquierda que considera que los problemas del país se pueden solucionar con nueva Carta Magna.
Sin lugar a dudas, el Ejecutivo está provocando una cortina de humo para distraer a la opinión pública. De esta manera estaría distrayendo a la población con esta polémica propuesta. Y así ocultar la incapacidad del actual régimen que ha conllevado por su pésima gestión a la actual crisis política y económica; que el Perú viene asumiendo tras la asunción de Pedro Castillo. Prueba de ello son los diversos paros de transportistas y de muchos otros sectores de la población; quienes demandan al Gobierno una mejor gestión para atender sus necesidades.
De igual manera, es inevitable el gran descontento popular que se siente en los bolsillos de muchas familias peruanas; ante el aumento de los precios en los productos de primera necesidad. Si bien la actual constitución de 1993 presenta algunos puntos complejos en material política y económica. Estos mismos se pueden modificar, a través de alguna enmienda por el actual Congreso.
La convocatoria para una nueva asamblea constituyente, a parte de ser insensata en el contexto actual que atraviesa el país; ante un Gobierno que cada día pierde legitimidad por la responsabilidad e incapacidad de los funcionarios; no nos asegura para nada que las cosas cambien en su totalidad. Más aun cuando el problema principal que tiene el país es el actual Gobierno sin rumbo y cuyo principal problema es el presidente Pedro Castillo.