Diario El Gobierno
  • Portada
  • Política
  • Economía
  • Mundo
  • Opinión
  • Sociedad
  • Primera Línea
Opinión

El juego del calamar; por Mario Arroyo Martínez Fabre

por Mario Arroyo diciembre 14, 2021
escrito por Mario Arroyo diciembre 14, 2021
756

Brutal, sádica, realista y simbólica. ¿En qué radica el encanto de El juego del calamar, la serie más exitosa de Netflix, con más de 142 millones de visualizaciones? ¿Por qué hipnotizó a un espectro considerable de la población una trama así? Si se trata, en realidad, de una trama sórdida y cruel, un sádico juego donde los perdedores son inmisericordemente asesinados.

El juego es una metáfora de la existencia hodierna salvajemente competitiva. Un lugar no digno para los perdedores. La puesta en escena del capitalismo en versión de juego sádico. Al mismo tiempo, representa al cansancio existencial propio de la sociedad secularizada, donde tanto los ricos como los pobres se enfrentan al hastío de vivir. Un diálogo entre los dos protagonistas, Seong Gi-hun y Oh Il-nam (el anciano moribundo), durante el último capítulo, cuando este último le explica las motivaciones que le llevaron a organizar el juego, explica este escenario. Se trata de la necesidad de una emoción fuerte que rompa la monotonía de la existencia. Y que, ataca por igual a los súper ricos y a los desesperados. De allí que, unos organizan el juego y otros lo juegan. En realidad, ambos vienen a evidenciar la banalidad de la existencia secularizada.

El juego es entonces una metáfora de la lucha por la supervivencia en medio de una sociedad impersonal e inmisericorde. Es una imagen bien lograda del vacío existencial que enfrentan las sociedades altamente desarrolladas, así como la honda ruptura que existe entre los ricos y los pobres. La vida en la sociedad pinta tan horrible, que es preferible el juego sádico a la fría sociedad. Por lo menos en el juego hay una esperanza de ganar y un sentido de lucha; en la sociedad, por el contrario, esa guerra está avocada necesariamente al fracaso y la relegación social.

Kang Sae-byeok, la desertora norcoreana, refleja claramente cómo no hay espacio para la confianza en medio de esta sociedad despersonalizada. Cada uno es un «lobo estepario» que con sus solas fuerzas debe hacer frente al desafío de la supervivencia. No confía en nadie, no quiere a nadie, excepto a su familia, a la que aspira a salvar. Muestra así cómo, el último reducto en la sociedad híper desarrollada, es la familia. Varios de los personajes coinciden en este diagnóstico: la familia es lo que los ancla a la vida, lo que los mueve a luchar.

Así, Seong Gi-hun lucha por su hija y por su madre, y cae en una profunda depresión cuando al finalizar el juego como ganador llega a su casa y la ve muerta. Nuevamente aparece ahí, en toda su crudeza, el vacío de la sociedad secularizada. El guionista se regodea en la crueldad. Nada ha valido la pena: han muerto 455 personas y, junto a ellos, su madre. El juego, la vida, no valen la pena.

Ese es el triste mensaje que transmite la serie. Aborda y entiende perfectamente al espejo donde reconocemos el sinsentido del absurdo juego que estamos jugando como sociedad. Todos mueren, y el único que sobrevive no encuentra la alegría de vivir, sino la depresión en el vivir. Las últimas escenas nos muestran a Seong Gi-hun como un zombie, un muerto en vida, en medio de una sociedad a la que le resulta indiferente su destino y solo es tomado en cuenta por la cantidad de dinero que acumula en el banco. El juego nos enfrenta con la crudeza del sinsentido de la vida, la banalidad de todos los esfuerzos que culminan en la muerte, la desesperanza para afrontar la vida. Y en esa realidad nos vemos reflejados, es el epítome de una sociedad plenamente secularizada.

Llama la atención cómo maneja la presencia cristiana en la sociedad. La ridiculiza a través de un personaje evangélico que reza a Dios mientras juega un juego donde el perdedor es asesinado, o a través de un predicador del eminente fin del mundo. Descalifica al cristianismo como alternativa para dotar de esperanza a la existencia, aunque reconoce su papel social a través del orfelinato llevado por monjas, donde está el hermanito de Kang Sae-byeok. Hace un guiño a la esperanza, precisamente por el personaje principal, despegado del dinero y que valora la amistad más que el triunfo. Abre una rendija a la esperanza también, al mostrar cómo vale la pena luchar por la familia. Pero, en síntesis, es un inquietante reflejo del sinsentido propio de la sociedad secularizada, donde el hombre es el lobo del hombre.

Más en Diario El Gobierno:

#Deportes | ¡Con sabor a Perú! Boca Juniors venció por penales 4-2 al FC Barcelona. La victoria llega luego del 1-1 en los 90 minutos del tiempo reglamentario. De esta forma, el equipo argentino, con Luis Advíncula y Carlos Zambrano, se coronó campeón de la Copa Maradona 2021. pic.twitter.com/szrYOj7NpK

— Diario El Gobierno (@ElGobierno_Peru) December 14, 2021
coreael juego del calamarjuego del calamarNetflixreligión
FacebookTwitterPinterestLinkedinWhatsappEmail
Mario Arroyo

Licenciado en Filosofía por la Universidad Panamericana, México D.F. y doctor en Filosofía por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, Roma.

post anterior
Francke: evasión tributaria asciende al 8 % del PBI
siguiente post
Juntos por el Perú respalda moción de censura contra Alva

También te puede interesar

Trump, tarifas y turbulencia: ¿un nuevo orden económico...

abril 20, 2025

La diplomacia comercial de Perú frente al proteccionismo...

febrero 4, 2025

El engaño verde: ¿cómo el marketing social puede...

noviembre 8, 2024

Pecados políticos e hibris partidaria: el (esperable) caso...

noviembre 8, 2024

Perú: una visión de futuro; por Aldo Lorenzzi

noviembre 4, 2024

Nueva Ley de Pensiones: ¿es el cambio que...

octubre 22, 2024

Un Estado sin dirección, por Aldo Lorenzzi Bolaños

octubre 3, 2024

Por una Latinoamérica unida: reflexiones al retornar de...

octubre 2, 2024

Dia Internacional de la Paz: construyendo un mundo...

septiembre 25, 2024

Reseña del libro «La deuda secreta del Perú»

septiembre 13, 2024

Buscador

Entradas Recientes

  • Homenaje teatral a Nicomedes Santa Cruz

    mayo 16, 2025
  • “El Secreto de los Pingüinos”: Bertie Gregory revela los lazos ocultos de estas fascinantes aves

    mayo 14, 2025
  • Monólogo teatral sobre Helena de Troya.

    mayo 13, 2025
  • Nadine recibe asilo en Brasil mientras Ollanta es recluido

    mayo 13, 2025
  • ULTRA Peru: una edición de gala para reconectar con la esencia de la electrónica

    abril 24, 2025

Redes Sociales

Facebook Twitter Instagram Linkedin

Sobre Diario El Gobierno

Sobre Diario El Gobierno

Diario El Gobierno es un medio de comunicación digital que posee como principal objetivo proporcionar información a la esfera pública sobre la coyuntura nacional e internacional.

Redes Sociales

Facebook Twitter Instagram Linkedin Tiktok

Equipo Editorial

Director periodístico: Víctor Andrés Marroquín-Merino

Subdirector: Diego de la Torre Colaizzo

Editor de Política: Pablo Cruz Ponce

Subeditor de Política: Luis Vargas Rojas

Editor de la revista «Sociedad»: Gabriel Bernal Gallegos

Subeditor de la revista «Sociedad»: Juan Cárdemas

Editor de la revista «Primera Línea»: Johan Dianderas

Coordinador de Audiovisuales: Sebastián Osorio

Editor de Economía: Gianela Sipión

Contacto

[email protected]

[email protected]

+51 968 969 019

Lo último

  • Homenaje teatral a Nicomedes Santa Cruz

    mayo 16, 2025
  • “El Secreto de los Pingüinos”: Bertie Gregory revela los lazos ocultos de estas fascinantes aves

    mayo 14, 2025
  • Monólogo teatral sobre Helena de Troya.

    mayo 13, 2025
  • Nadine recibe asilo en Brasil mientras Ollanta es recluido

    mayo 13, 2025

@2022 - Diario El Gobierno. Todos los derechos reservados.

Diario El Gobierno
  • Portada
  • Política
  • Economía
  • Mundo
  • Opinión
  • Sociedad
  • Primera Línea
Diario El Gobierno
  • Portada
  • Política
  • Economía
  • Mundo
  • Opinión
  • Sociedad
  • Primera Línea
@2022 - Diario El Gobierno. Todos los derechos reservados.