Las tensiones entre palestinos e israelíes han abierto un nuevo capítulo al ya conocido conflicto entre ambos pueblos. Hasta el momento ha dejado un saldo de al menos 30 víctimas palestinas en ataques aéreos de Israel en Gaza, entre ellos diez niños, según fuentes sanitarias de la Franja.
Estos nuevos enfrentamientos entre Israel y el movimiento islamista Hamás, en el poder en la Franja de Gaza, los dirigen hacia una “guerra a gran escala”, advirtió este martes el enviado especial de la ONU para Oriente Medio, Tor Wennesland, quien pidió a las partes que pongan fin “inmediatamente” a los enfrentamientos.
“Detengan inmediatamente los disparos. Esta escalada se dirige hacia una guerra a gran escala. Los líderes de todos los bandos deben comprometerse con una desescalada. Una guerra en Gaza sería devastadora y la gente pagaría el precio”.
Wennesland en Twitter.
Durante la jornada del lunes, se registró un incendio en la explanada de las mezquitas, mientras múltiples ataques aéreos están asolando Gaza, un bombardeo aéreo masivo que ha sido aprobado por los ministros israelíes del gabinete de seguridad de alto nivel.
«Hamás debe recibir un duro golpe y, sin embargo, todos comprenden nuestras limitaciones: no tenemos deseos de grandes guerras», manifestó un funcionario israelí al sitio de noticias Ynet.
Por otro lado, el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, advirtió la noche de este martes que los ataques israelíes en la Franja de Gaza eran “solo el comienzo” de una campaña del ejército israelí que todavía tiene “muchos objetivos en la mira” para debilitar a Hamás, que controla el territorio palestino y que desde el lunes ha lanzado centenares de cohetes contra Israel.
“Ningún país soberano aceptaría que se disparara contra su población, nosotros tampoco lo aceptamos”, afirmó, tras la muerte el martes de tres personas en Israel en ataques con cohetes lanzados desde Gaza.
Los residentes despiertan o por las bombas o las sirenas e inmediatamente acuden a los refugios mientras se reportan explosiones en la zona centro y sur de la capital de Israel.
El conflicto
En las últimas semanas crecieron las tensiones entre los palestinos y las tropas israelíes. Hubo enfrentamientos en casi todas las noches, se dio el desalojo planificado de familias palestinas del barrio de Sheikh Jarrah, y un plan de judaización de la Ciudad Santa, en el cual los tribunales israelís han dado a los colonos sionistas la razón en la batalla legal para hacer suyas las propiedades de decenas de palestinos.
El descontento causado por el desalojo de las familias israelíes desencadenó protestas en las explanadas de las mezquitas, dejando cientos de heridos durante los últimos días.
Así también, desde hace aproximadamente un mes, Israel impidió algunas reuniones del Ramadán, celebración religiosa sagrada para los musulmanes. Además, suspendió la entrada de 83.000 palestinos durante esta festividad tras la muerte de cuatro personas en un atentado perpetrado en Tel Aviv.
Hasta el momento, al menos 130 cohetes fueron disparados solo el martes contra el área metropolitana de Tel Aviv, donde se concentra la mitad de la población de Israel, desde la franja de Gaza.
