La Asociación de Contribuyentes del Perú ha elaborado un informe sobre la ejecución del presupuesto destinado a salud en los últimos 9 años. En este, se evidencia que solo un 20 % en promedio ha sido destinado a inversión pública, del cual, solo se ha ejecutado un 65 % en los últimos 5 años.
Según especifica el informe, el gasto corriente asignado al rubro salud se divide en tres grandes partidas: pago al personal, suministros médicos y otros gastos corrientes; los que en suma agrupan un 80 % del presupuesto asignado al sector salud.
De acuerdo con el informe publicado por la Asociación de Contribuyentes del Perú, en dicho periodo la duplicación ocurrió a la par con el gasto, que pasó de S/ 7,781 millones en 2011 a S/ 18,513 millones en el 2019. Pero desde el año 2015, el nivel de ejecución de la inversión pública se encuentra con una tendencia a la baja, ubicándose en promedio en 65 %, según Marcel Ramírez, Director de la Asociación de Contribuyentes.
En el año 2012, un informe realizado por la Dirección General de Epidemiología analizaba la situación de salud del Perú. En este se daba cuenta de que el país contaba con 9.46 médicos por cada 10 000 habitantes. Hoy en día, y con un presupuesto duplicado para el sector salud, la cifra asciende 12.8 profesionales sanitarios por cada 10,000, una mejora de apenas 35 puntos porcentuales en 8 años.
Según Daniele Ingratoci, coordinador del Programa de Asistencia Técnica al Ministerio de Salud de Perú (MINSA) de la Cooperación Italiana, este número nos coloca muy por debajo del promedio de médicos por habitante de la OCDE, compuesto por 33 médicos por habitante.
Para José Ignacio Beteta, Presidente de la Asociaciòn de Contribuyentes del Perú, el problema no radica en un incremento del presupuesto, sino en la necesidad de una reforma del sector salud que debe incidir sobre la falta de flexibilidad en la gestión de recursos humanos, actualmente caracterizado por un régimen sumamente sindicalizado: “En la medida que no se reforme la gestión de los recursos, el sistema de salud continuará siendo precario, con doctores trabajando pocas horas y con un déficit de profesionales en las regiones”.
Ante ello, especifica que hay dos elementos sobre los cuales hay que trabajar: “hay un déficit de profesionales de la salud, no solamente en cuanto a calidad, sino también en la forma en cómo están distribuidos, hay muchos profesionales de la salud que deberían estar destacados en otras regiones del país, resignar recursos humanos donde se necesitan”.
La pandemia ha sacado a la luz las deficiencias estructurales, y en especial en términos de infraestructura y personal. En ambos, una mejora en la gestión del presupuesto, y su ejecución, podrían haber reducido el ambiente de incertidumbre y el colapso del sistema sanitario.
Al respecto, la Asociación de Contribuyentes del Perú, recomienda que las autoridades competentes pongan especial atención en la ejecución del presupuesto y que se propongan metas para su evaluación constante, así como la evaluación de un posible incremento de proporcionalidad del monto destinado a inversión pública respecto al presupuesto total del sector.