La informalidad es una problemática a la cual no se le ha prestado la suficiente atención; sin percatarse que afecta directamente a los jóvenes en sus futuros empleos. El gobierno de turno proclama proteger los intereses del pueblo; sin embargo, no han administrado correctamente las reformas legales para mejorar las condiciones laborales de la mano de obra menos calificada. La cual está generalmente está conformada por el sector con menor recursos económicos.
Entre las reformas para mejorar las condiciones laborales tenemos que elevaron el salario mínimo, se limitó la tercerización y la promoción de sindicatos. Pero se ignoró que estas acciones podrían poner en riesgo la formalidad y empleo en el país.
EVIDENCIA EN EL PERÚ
Un reciente estudio “Legislación de protección del empleo y capacitación en el trabajo en un mercado informal: Evidencia de Perú” realizado por Jaramillo y Escobar (2022); evidencia la precariedad de las condiciones laborales cuando existe informalidad. La mayoría de estos casos están relacionado al sector de los hogares más vulnerables.
Existe un alto grado de relación entre ser parte de un hogar de bajos recursos y formar parte del sector informal debido a factores como la educación precaria. Asimismo, las primeras experiencias laborales definen las condiciones en el futuro; es decir, los jóvenes que obtienen empleos en condiciones precarias, en el futuro tendrán empleos de baja calidad. Por ello, combatir la informalidad debería ser un asunto de gran relevancia en la agenda del gobierno.
En el 2019, periodos pre pandemia, la tasa de empleo de los jóvenes era relativamente alta a nivel regional; superior a países con mayores ingresos como Brasil, Chile y Uruguay. Sin embargo, los niveles de bienestar de los jóvenes era preocupantemente bajos debido a la condiciones laborales evidenciadas por el 71% de jóvenes trabajando de manera informal; es decir, sin contrato, sin seguro, sin derecho a CTS, entre otros.
LEE TAMBIÉN: BCRP: ¿cómo se desempeñó la actividad económica en junio?
IMPACTO EN LOS JÓVENES
Las brechas entre trabajadores formales e informales afecta directamente en la actividad laboral juvenil. Debido a la poca experiencia y el aprovechamiento de algunas empresas, muchos jóvenes se encuentran trabajando en el sector informal donde ganan en promedio 40% menos que en el sector formal.
Cabe resaltar que las remuneraciones son muy bajas en la informalidad. Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), los jóvenes en el sector informal tienen una probabilidad 6 veces más alta de tener un salario por debajo del mínimo que los jóvenes en el sector formal.
Por otro lado, este estudio indica que la probabilidad de que un joven asalariado informal reciba capacitaciones es 20pp inferior a uno formal. Es por ello que se resalta que las primeras experiencias laborales predicen la calidad de empleos a futuro; es decir, los jóvenes que pertenecen al sector informal tienen menos oportunidades de mejora.
En ese sentido, erradicar la informalidad mejorando las experiencias laborales podría aumentar las probabilidades de tener una mejor calidad de vida en el futuro. Este estudio hace una llamada de atención a las autoridades pertinentes a realizar políticas que proyecten un futuro mejor para los jóvenes.