Goles, oportunidades para anotar, disputas fuertes de balón y hasta expulsiones fue lo que dejó una edición más del superclásico argentino. En cancha de Boca, se firmó sexagésimo cuarto empate entre el “Xeneize” y “El Millonario”.
No paran los goles con ritmo
Los primeros 45 minutos ya presagiaban un duelo friccionado no solo en el medio campo, sino también en la puerta del arco de cada equipo. Los dirigidos por Russo inclinaron un poco más la balanza previo al descanso, lo cual se pudo notar en una jugada donde Zambrano sale bien de la marca, profundiza la pelota, Tévez resuelve de primera con el taco y antes de que Capaldo pudiera buscar a Villa, el chileno Díaz obstruye y le cede un penal a Boca. Es así que el colombiano Villa (41´) pudo hacerse presente y definir al medio con un remate potente para vencer la resistencia de Armani, quien mostró una buena performance a lo largo del encuentro.
Primera conquista con River
Ya para la segunda mitad, los locales intensificaron su ataque y se quedaron a nada de ampliar la diferencia ante el equipo del “muñeco” Gallardo. Para contrarrestar esto, River seguía contando con un Armani bien concentrado bajo los tres palos. A esto más adelante, se le sumaría mejores elaboraciones, como a los 67´ un centro de Angileri al borde del área chica que ubicó a un debutante Palavecino de buena ubicación. Con quizás el mejor gesto técnico del partido y de cabeza “el pibe nuevo” cambiaba el ánimo de sus compañeros, pero la paridad se mantendría hasta el pitazo final.
Una vez más Zambrano
A la vuelta de la esquina, exactamente un minuto después, Andrada tocaba con Carlos Zambrano para intentar salir de la presión; sin embargo, el defensor peruano cubría el balón una vez más con los brazos abiertos mandó al piso al atacante Matías Suárez. El árbitro lo consideró imprudencia como la que tuvo con Nicolás de la Cruz y así vio la tarjeta roja, que más tarde sería criticada por su entrenador y algún compañero. ¿Significará esto salir del once de Miguel Ángel Russo?
Russo no puede con el Muñeco
El entrenador argentino ya sabía lo que era ganarle a River; no obstante, esos cruces no involucran a Marcelo Gallardo. Este último ya sabe lo que es ganarle al principal rival y actual técnico. Con lo acontecido ayer “el muñeco” acumula 4 victorias y 5 empates enfrentando al ex referente de Estudiantes de la Plata.
¿El Diego presente en el partido?
Corría el minuto 43′ después del gol visitante; es decir, a nada de irse a las duchas. Girotti luchaba codo a codo para sacar un centro, logró ejecutarlo y esta vez halló una carambola que terminó en la cabeza de Izquierdoz. Gallardo y compañía desde el banco tenían el grito en la garganta, pero un efecto extraño cerca de la línea mandó la pelota al costado del palo derecho de Andrada. Si bien Zuculini no renunció a la jugada, el arquero mendocino obstruyó el remate y dejaba respirar nuevamente a los suyos.
No más espionaje
Una curiosidad de este superclásico fue la presencia de un objeto identificado entre los suplentes del “millonario” en primera instancia. Un miembro del comando técnico se encargó de retirar el micrófono colocado en la parte superior del banco y así se cumplía con los deseos de Marcelo Gallardo: privacidad para lo charlado con sus jugadores y que solo se hable del juego.
