A pesar de la derrota frente al número 9 del mundo, Félix Auger-Aliassime, ‘Juanpi’ aleccionó y trascendió en el deporte nacional con su participación en el cuadro principal del Roland Garros. En un deporte con muchas alegrías en el pasado, Varillas, muy cerca del top 100, nos da la esperanza de vivir el presente mientras deja su propia huella.
Un alma inagotable
Juan Pablo, el 22 de mayo del presente año, rompió una racha negativa del tenis peruano. Desde Lucho Horna en el US Open de 2008, la bandera peruana no se hacía presente en uno de los 4 grand slam. Sin embargo, remar contra toda esta marea pesimista, solo está a la altura de los grandes. Así, después de seis intentos fallidos en los qualy, Varillas, lejos de tirar la toalla, logró una de sus mayores metas personales: clasificar al cuadro principal de uno de los 4 torneos más importantes del circuito del tenis. Con ello, marca su nombre en la historia del tenis peruano, pero nos devuelve la ilusión de disfrutar un notable presente.
Ahora, mientras intenta lograr el tan ansiado Top 100 y dejar atrás los recuerdos nostálgicos de un gran tenis nacional, se prepara para, junto al equipo peruano, lograr la clasificación a las instancias finales de la Copa Davis. La selección peruana deberá enfrentarse a la chilena, el mes de septiembre, para entrar a los playoffs de la etapa final. ‘Juanpi’, quien logró su presencia en un grand slam frente al chileno Nicolás Jarry, espera ‘repetir el plato’ y ser una pieza fundamental, nuevamente, en el cuadro nacional.
Perú se encuentra en el Grupo Mundial I de la Copa del Mundo de tenis. De caer contra Chile, deberá pelear, el próximo año, por no descender al Grupo Mundial II.
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Una lección arriesgada
El tenista peruano es una demostración de lo que pasa cuando una persona puede centrarse solo en el deporte como profesión. Muy a diferencia de la realidad de muchos deportistas, mayormente, no ligados al fútbol, Varillas no se dedica a otra actividad que no sea el deporte para subsistir. De hecho, valientemente, se retiró de sus estudios universitarios sin conocimiento de su familia.
Con ello, ‘Juanpi’ se dedicó de lleno a la ‘raqueta’ y vive un presente admirable dentro del panorama tenista peruano. Así, el representante nacional muestra el camino hacia el éxito dentro de una cancha: dedicarte a competir.