En el Camp Nou, el club blaugrana renunció a su última oportunidad para mantenerse con pie firme en su lucha por el campeonato de la Liga Española. Con una actuación desastrosa, el FC Barcelona perdió ante el Cádiz por la mínima y se aleja del primer puesto, ya que el Real Madrid ayer remontó su partido para llevarse los tres puntos. Con ello, la diferencia se hace, prácticamente, inalcanzable para los culés.
Un partido muy individual
La individualidad tuvo un papel protagonista en este encuentro. Por parte del FC Barcelona, el juego colectivo careció de intensidad. Así, sobresalió quien más ganas tenía por la banda. El más rebelde, el más revoltoso, fue Dembélé durante todo el partido y quien se encargó de generar las ocasiones más peligrosas. Sin embargo, no estuvo acertado de cara a los últimos metros, al igual que todo el equipo blaugrana. Además, para su infortunio, el portero rival, Ledesma, fue la figura del partido, pues respondió notablemente en los pocos remates peligrosos al arco que tuvo.
Por otro lado, el Cádiz aprovechaba la paupérrima actuación defensiva del equipo para contragolpear con pocos arietes. Sin embargo, fueron pocos pero efectivos. Así, Ter Stegen tuvo que intervenir hasta en tres ocasiones y agradecer en otras dos, pues sus rivales, de cara a portería, tiraron el balón afuera.
No obstante, el solitario gol llegó después de una pérdida, incomprensible, de Jordi Alba. En el minuto 47, Alex recupera el balón y manda el centro al área para, posteriormente, ser rematado hasta tres veces dentro del área.
El primero, fue de cabeza por parte de Rubén Sobrino. El guardameta alemán consigue atajar, pero el rebote vuelve a ser pescado por Sobrino para su segundo remate. Stegen, con reflejos felinos, consigue despejar por segunda vez. Sin embargo, le ganaron el vivo a toda la defensa culé y Lucas Pérez empujaba el segundo rechazo para convertir el gol.
El rostro desencajado y como abandonado de Ter Stegen, en el tanto, reflejaría lo que fue el partido para su equipo: mucha individualidad ofensiva y defensiva.
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Una temporada guinness
Mientras se consumaba el desastre, era inevitable recordar la era Koeman. No fue por el juego, sino porque el resultado sumaba otra racha negativa para la historia del club blaugrana en la presente campaña. Así, en esta temporada, el Barcelona ha perdido tres clásicos consecutivos (1-3 / 2-1 / 1-2), alcanzó hasta 6 partidos seguidos sin ganar de visita, no era noveno, o peor, en la clasificación después de 10 partidos desde la temporada 2002-2003, no pasó de fase de grupos de la Champions League, entre otros. Ahora, de la mano de Xavi, suman un hito negativo más: por primera vez, el Cádiz gana en el Camp Nou.