Sorpresivamente, el presidente de la República decidió reaparecer en la pantalla televisiva dispuesto a ser entrevistado. Sin embargo, poco o nada logró esclarecer ante la pregunta de su cercanía con cuestionadas figuras dentro de su entorno. Exactamente, la referencia giraba en torno a Vladimir Cerrón y Karelim López. A continuación, Diario El Gobierno te cuenta cuáles fueron las palabras de Pedro Castillo sobre estos personajes y si estas afirmaciones resultan ser ciertas.
Gobierno y Cerrón: solo una cuestión de partido
El jefe de Estado negó que el secretario general de Perú Libre, Vladimir Cerrón, haya influido en los nombramientos dentro del Ejecutivo, pues asegura que todo lo que recibe son sugerencias. Ante ello, se debe recordar que el «líder del lápiz» ha reclamado, en más de una ocasión, cierta cuota de poder para la bancada que llevó a la victoria a Pedro Castillo.
En efecto, los hechos dicen más que las palabras, ya que parte de los funcionarios designados por el mandatario tenían una relación cercana a Vladimir Cerrón. Tales fueron los casos de Guido Bellido, ex presidente del Consejo de Ministros; Luis Barranzuela, ex ministro del Interior; y Ricardo Belmont, quien se quedó a medio camino de ser asesor del presidente de la República.
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Generosidad en Palacio de Gobierno
Sobre el escándalo de la licitación ganada por Karelim López, Pedro Castillo negó conocerla. Además, aclaró que la fiesta organizada por la empresaria a su hija fue «una sorpresa» incluso para él, quien se dio cuenta del evento por el bullicio del mismo.
No obstante, pese a que hay una reiteración en esperar los resultados de la investigación, el registro de visitas del Portal de Transparencia evidencia la presencia de Karelim López en más de una oportunidad en Palacio de Gobierno. Las reuniones fueron con el jefe de Estado y Bruno Pacheco, ex secretario presidencial. Por otro lado, el mismo personaje también está presente en las reuniones clandestinas de la casa de Breña que, en palabras del presidente, se trata de «videos montados».
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¿Una entrevista de disgusto?
La perspectiva de Pedro Castillo sobre su entrevista parece que no fue positiva. De hecho, comentó que se quedó «sorprendido» por algunas preguntas que nada de importante tienen para el país —en referencia al cuestionamiento de los visitantes en la casa de Breña—. «Acá tenemos las cosas muy claras, no hemos venido a robarle ni un centavo al país, sino a contribuir en la nación».
