Durante estas últimas semanas, el anuncio de que llegaría un primer lote de vacunas contra el COVID-19 viene desatando las críticas de diversos especialistas contra el Gobierno. Como se sabe, el laboratorio Sinopharm acordó con el estado peruano la entrega de 1 millón de antídotos contra el nuevo coronavirus para el presente mes; sin embargo, aún existe incertidumbre respecto a si realmente llegará en la fecha acordada.
Al respecto, Diario El Gobierno conversó en exclusiva con el médico Germán Málaga, investigador principal del estudio clínico de la vacuna Sinopharm en el Perú de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, para resolver todas las dudas que existen en torno a la vacuna fabricada por la farmacéutica china y los avances que se tienen en la investigación.
Eficacia de la vacuna
«El casi 80 % de eficacia, obtenido de los datos internacionales, nos da a conocer que no es una mala eficacia. Todos conocemos que hay otras vacunas como la de la influenza que presenta un 50 % y hoy se utiliza para prevenir la enfermedad»; señaló Málaga.
Asimismo, explicó que se deben considerar dos términos en el tema de las vacunas: eficacia y efectividad. El primero hace referencia a los estudios clínicos y el segundo a la aplicación en el mundo real. Este último permite saber que con la correcta manipulación de la vacuna y el uso adecuado de la cadena de frío; probablemente la vacuna mantenga la eficacia de los estudios realizados. «Hay vacunas que podrían tener más eficacia, pero no la misma efectividad en el campo», expresó.
Avances de ensayos clínicos
«Estamos avanzando más rápido de lo esperado y confiamos en tener los resultados de eficacia en cuatro o cinco semanas. Lo que podemos adelantar es la seguridad que tiene, porque no hemos tenido ningún caso severo atribuible a la vacuna», indicó el investigador principal sobre los resultados de eficacia de los estudios en Perú.
En esta línea, resaltó que la vacuna de Sinopharn es importante, pues ha sido probada en casi 72 mil voluntarios de ensayos clínicos y aplicada en más de 10 millones de personas en China sin presentar ningún caso severo.
Compra de Perú
Sobre la reciente adquisición de 38 millones de dosis contra el SARS-CoV2 del laboratorio Sinopharm, Málaga destacó que es una compra con alta relevancia. Esto, porque se necesita empezar a inmunizar a la población para evitar una «tercera ola», como ya ha ocurrido en otros países. «El porcentaje para tener una inmunidad de rebaño es más del 70 % de la población, quiere decir que se necesita vacunar a más de 24 millones de peruanos», agregó.
Denuncias de voluntarios
En los últimos días, participantes peruanos del estudio clínico han denunciado en diferentes medios de comunicación el incumplimiento de algunos beneficios que reciben los participantes de la investigación.
«Si se demuestra que las vacunas son eficaces y usted recibió placebo, usted será priorizado para recibir la vacuna en cuanto el estudio termine», indica el consentimiento informado entregado a los voluntarios.
En otro momento, el doctor Germán Málaga precisó que únicamente se ha variado el orden de vacunación, mas no el resto de los beneficios indicados. «Cuando llegue la vacuna, vamos a empezar a vacunar a los de primera línea, los pacientes con morbilidad y los voluntarios (…) El punto es que tiene sentido que se vacune según el cronograma presentado por el Estado», dijo .
También sostuvo que cuando la vacuna llegue se empezará vacunando a los grupos de primera línea; luego, a las personas con enfermedades morbiles y finalmente a las personas sanas. Cabe resaltar que este es el orden establecido por el Gobierno y los voluntarios inmunizados serán los que recibieron placebo.
Medidas del Gobierno
«Son medidas muy tibias, que dejan al libre albedrío, el que la gente decida si cumple o no. La gente no entiende lo que está pasando. Uno no se da cuenta hasta que le pasa y ahora las personas de los círculos más cercanos ven que la situación se complica», aseveró Málaga sobre las decisiones del gobierno.
«Deberían tomarse medidas más severas para mitigar los contagios. Todos los que se enfermen ahora no van a tener donde atenderse ni en privado ni en público», añadió el médico internista.
Finalmente, dijo que no hay necesidad de llegar a una cuarentena general sino focalizada en las regiones que ya se encuentran colapsadas en su capacidad de atención.