Este viernes, la Agencia Marítima del Reino Unido informó que se habían desatado tres incendios a bordo de un petrolero de bandera griega en el mar Rojo. Esto sucede un día después de que las tripulaciones de rescate evacuaran a la tripulación, tras un ataque perpetrado por los hutíes de Yemen.
Los hutíes, que están alineados con Irán y controlan las áreas más pobladas de Yemen, declararon que atacaron el petrolero Sounion como parte de su campaña de 10 meses contra el transporte marítimo comercial. Ello en apoyo a los palestinos en la guerra entre Israel y Hamas en Gaza. El ataque inicial, realizado el miércoles, causó daños al petrolero con varios impactos que generaron incendios y dejaron al barco sin energía.
La tripulación, compuesta por 25 filipinos y rusos, junto con cuatro guardias de seguridad privados, fueron evacuados por un destructor francés y trasladados a Yibuti. Según una fuente de seguridad marítima que habló con Reuters, el petrolero se encontraba anclado entre Yemen y Eritrea sin tripulación. Asimismo, la UKMTO informó este viernes sobre los tres incendios a bordo del buque. Ante ello, señaló que este «parece estar a la deriva». Ese mismo día, los hutíes compartieron un video en redes sociales que mostraba cómo incendiaban el barco.
El petrolero siniestrado, que transportaba 150.000 toneladas de crudo, representa una amenaza ambiental. «Un posible derrame podría tener consecuencias catastróficas para el medio ambiente marino en la región», advirtió la Autoridad de Puertos y Zonas Francas de Yibuti en un comunicado publicado en la red social X. Según la Federación Internacional de Propietarios de Petroleros Contaminantes, el mayor derrame petrolero registrado ocurrió en 1979 cuando 287.000 toneladas de petróleo se derramaron del Atlantic Empress tras una colisión con otro buque en el Caribe.
Contexto del conflicto en Yemen
Los hutíes, un grupo rebelde chiita yemení, han estado luchando contra el gobierno internacionalmente reconocido de Yemen desde 2014. El conflicto se ha complicado con la intervención de una coalición liderada por Arabia Saudita en 2015, que apoya al gobierno yemení.
Este grupo afirmó que el ataque fue, en parte, porque Delta Tankers violó su prohibición de «entrar en los puertos de Palestina ocupada», según declaró el portavoz militar hutí, Yahya Saree. Delta Tankers, por su parte, indicó en un comunicado el viernes que está tomando todas las medidas posibles para mover el buque y la carga. Sin embargo, no proporcionaron más detalles por razones de seguridad.
De esta manera, el ataque al petrolero griego es parte de una campaña contra la navegación en el mar Rojo. Ello como represalia por la guerra en curso entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza. Los ataques han interrumpido una ruta comercial clave por la que suelen pasar anualmente mercancías por valor de un billón de euros.
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Reacciones internacionales
Un funcionario de defensa de Estados Unidos, que habló bajo condición de anonimato, confirmó que las autoridades estadounidenses estaban al tanto de los incendios en el petrolero y seguían de cerca la situación. La Unión Europea, a través de su misión naval Aspides en el Mar Rojo, expresó su preocupación por la seguridad de la navegación y el medio ambiente, dada la carga de crudo del Sounion. La misión hizo un llamado a la prudencia y a evitar cualquier acción que pueda empeorar la situación actual[1].
Además, el incidente interrumpe el tráfico marítimo en una ruta comercial vital, lo que podría tener repercusiones económicas significativas a nivel regional e internacional.