El mundo de los deportes está lleno de disciplinas, de las cuales cada una de ellas tiene sus propias curiosidades, rituales y reglas comprendidas solo por los fanáticos de este deporte. Este fin de semana atestiguamos una situación inédita que dejó atónitos a toda la prensa deportiva y a los espectadores ajenos al hockey. Sin embargo, no era una escena inusual para sus fanáticos, pues sobre el terreno de juego mientras se disputaba el primer tiempo del partido entre los New York Rangers y los Philadelphia Flyers los jugadores Matt Rempe y Nicolas Deslauires se retaron a una pelea que duró un minuto, deteniendo el juego y captando la atención de las cámaras. Tras la larga pelea, en la cual ambos salieron visiblemente golpeados, el juego se reanudó como si nada hubiera pasado, volviendo a poner en tela de juicio si deberían ser o no aceptadas estas peleas.
No obstante, la Liga Nacional de Hockey (NHL por sus siglas en inglés), presumió orgullosa esta situación, dejando en claro que este ritual dentro del deporte es considerado favorable para el desarrollo de la disciplina, pues estas situaciones se encuentran reglamentadas dentro del campeonato, pues en primer lugar solo se aceptan peleas 1 contra 1. En segundo lugar, no se pueden usar ningún tipo de implemento deportivo como lo podrían ser los sticks de hockey o los guantes de plástico o de cuero, en tercer lugar, pueden usar sus cascos y protectores bucales, no obstante la pelea no se detiene si es que se pierde alguno de ellos, en cuarto lugar, la pelea se detiene si ambos deportistas deciden hacerlo o si es que alguno de ellos dobla la rodilla o cae al suelo, solo en esa situación intervendrán los árbitros deteniendo el combate. Posteriormente, las peleas pueden conducir a una sanción de unos cuantos minutos en el banquillo.
La Liga alega que al permitir estas luchas se busca evitar que durante el transcurso del juego se lleven a cabo acciones violentas que pongan aún en mayor peligro la integridad de los deportistas. Pues debemos recordar que una caída sobre hielo o un empujón e incluso el usar los implementos podría ser mucho más riesgoso y provocar graves lesiones. Por ende, se considera que al permitir a los deportistas saldar sus rencillas en un escenario relativamente seguro se evita que posteriormente se continúe con la violencia. Además, por supuesto, de que los fanáticos alientan a sus jugadores cuando se encuentran en alguna riña durante el partido, siendo un atractivo y distintivo del deporte.
Actualmente, el debate se ha vuelto a poner sobre la mesa respecto de si deberían continuar permitiendo este tipo de situaciones, pues incluso el comité olímpico ha prohibido las peleas durante el certamen, sin embargo, continúa siendo legal en las ligas nacionales. Por un lado, esto permite a los deportistas resolver algunas disputas propias de la emoción del partido, pero también puede provocar situaciones peligrosas que pueden ser consideradas impropias para un deporte profesional. La pregunta es ¿Deberían seguir permitiéndose las peleas en el hockey sobre hielo?