Poco a poco se le está dando la importancia debida a la salud mental, pues esta es igual de importante para nosotros como lo es la salud física, el aseo personal o la alimentación; engloba todo la salud mental. Por ello, Revista Sociedad te cuenta por qué es importante cuidarla y algunas claves para mejorarla.
¿Es importante?
En realidad, sí. Aunque muchas personas no lo crean, la salud mental debe considerarse fundamental para nuestra salud en general, pues sin ella, no podemos alcanzar una óptima estabilidad integral.
Además, esta puede ayudar a enfrentar a diversos aspectos de nuestra vida cómo lidiar con el estrés, estar físicamente saludables, mantener buenas relaciones, contribuir en forma significativa a la comunidad, trabajar productivamente y alcanzar el potencial completo.
De igual manera, como nos preocupamos por comer de manera saludable, ejercitarnos, terminar un pendiente a tiempo o, simplemente, vernos bien al momento de salir alguna reunión, deberíamos darle la misma importancia al cuidado de nuestra salud mental.
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Claves para mejorar nuestra salud mental
Practicar la gratitud
Esto significa ser agradecido por todas las cosas buenas que tenemos o suceden en nuestra vida. Es útil recordarlo todos los días, ya sea pensando en lo que se está agradecido o escribiéndolo en un diario, es una muy buena opción. Es importante darse un momento para pensar o recordar alguna experiencia positiva que hayamos tenido. Practicar la gratitud puede ayudarte a ver tu vida de manera diferente.
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Meditar
Esta es una práctica donde cuerpo y mente se enfocan en la atención y conciencia. La meditación nos ayuda, ya que aumenta la felicidad, mejora tu imagen personal y nos ayuda a tener una visión más optimista de la vida. También, disminuye el nivel de estrés y el nivel de ansiedad, ayuda a aumentar la conciencia personal, aumenta la oxitocina, la hormona del amor y a tener un pensamiento divergente.
Cuidar la salud física
Es muy cierto que el cuerpo está conectado con nuestra mente. Es por ello que el realizar ejercicio físico influye en nuestro estado de ánimo. Una manera de cuidarnos físicamente es estar activos. Así, el ejercicio puede reducir la sensación de estrés y depresión y mejorar el estado de ánimo. También, es fundamental para nuestro cuerpo dormir lo suficiente, pues el sueño afecta nuestro estado de ánimo. Por último, alimentarse saludablemente es una buena manera de sentirnos mejor físicamente, pero también ayuda a mejorar el estado de ánimo y disminuir la ansiedad y el estrés.
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Trazar metas y objetivos
Para mantener una buena salud mental es importante que te plantees objetivos en tu día a día, metas alcanzables y prioridades. Así te comprometes y adquieres un nuevo hábito, donde poco a poco añades retos y nuevas metas. Como se dice, las pequeñas victorias aportan una gran satisfacción en nosotros. Realiza una tarea, esfuérzate, comprométete a desarrollarla y poco a poco ponte objetivos más ambiciosos. ¡Seguro que lo consigues!
Construir relaciones sanas
¡No más relaciones o vínculos tóxicos! Esto solo nos consume y no somos felices ni tenemos tranquilidad. Tener un buen apoyo social puede ayudarte a protegerte contra los daños del estrés. Asimismo, es bueno tener diferentes tipos de conexiones. Aparte de relacionarse con familiares y amigos, puede encontrar formas de involucrarse con su comunidad o barrio, siempre y cuando sea un ambiente positivo y saludable.
