El equipo femenino de Alianza Lima se llevó el clásico (2-0) contra de Universitario de Deportes de manera notable. A nivel deportivo, este enfrentamiento tuvo todo lo que una rivalidad histórica exige. Sin embargo, para llegar a ese nivel de sensaciones y profesionalidad, existen diversos factores que la mayoría de clubes e hinchas deberían adoptar y que el clásico ha puesto más que en manifiesto.
Una victoria de profesionales
Lamentablemente, la liga femenina se ha profesionalizado, pero sus jugadoras aún no. El campeonato solo cuenta con once futbolistas que firmaron un contrato profesional con sus clubes el 2022. Siete son de Alianza Lima y cuatro de Sport Boys. El torneo lo disputan 13 clubes.
Paradójicamente, las blanquiazules se llevaron este encuentro con categoría. Quizás, es una consecuencia directa de hacer bien las cosas en toda su estructura organizacional. Así las cosas, de las siete jugadoras con contratos profesionales, seis fueron titulares hoy contra el cuadro crema. De hecho, dos de ellas anotaron para la victoria de hoy.
De esta manera, arrancaron Adriana Lúcar (gol), Sandy Dorador, Alison Reyes, Neidy Romero (gol), Annie del Carpio y Heidy Padilla. La restante, Miryam Tristán, probablemente, también hubiese conformado parte de este grupo. No obstante, se encuentra en recuperación debido a una lesión ocurrida el mes pasado.
Así, no solo Alianza triunfó en este clásico. La profesionalidad, entendido como su condición contractual y la del propio club y no como una falta de compromiso por parte de las jugadoras, venció también.
El mensaje es claro. Si bajo esta circunstancia se ha logrado un partido digno de imitar, la profesionalización de los contratos de las jugadoras debe ser prioridad de cada club.
La liga femenina viene sumando más patrocinadores y apoyo de las empresas privadas. Esperemos que este panorama ayude con sus salarios y, a su vez, a mejorar la competitividad como se ha visto el día de hoy.
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Que no sea solo por el clásico
El entusiasmo de los hinchas por ver un nuevo episodio de la rivalidad más grande del Perú no debería quedar solo en el clásico. Hoy, en el partido de la UCV frente a Sporting Cristal, la peque, Emily Flores, dio cátedra para un estadio lleno de cámaras, pero vacío de gritos.
Sin embargo, este sabado, el Estadio Monumental de Ate contó con una numerosa presencia de hinchas cremas e, incluso, íntimos camuflados, pues, según el representante de la Dirección de Seguridad Deportiva, se encontraron hasta 20 personas que celebraron los goles de Alianza Lima con el polo blanquiazul en la tribuna occidente. Recordemos que la orden era jugar solo con hincha local.
Evidentemente, esto no se debe volver a repetir, pero lo que resalta es que para el clásico el público estuvo igual de animado que en un partido normal de Liga 1.