«Así queremos ver al país, caminando firme, sin ningún tropiezo, con confianza. Muchos años este país ha sido conducido por grandes expertos políticos, con grandes autoridades, yo pido al país, a los peruanos, que nos deje trabajar». Estas son las declaraciones del presidente de la República, Pedro Castillo, desde una actividad ceremonial en el colegio PRITE Canto Grande de San Juan de Lurigancho.
“Denle la oportunidad a un maestro”
El mandatario agregó que «De los 200 años de vida republicana, denle la oportunidad a un maestro por cinco años de 200 años que le corresponde a este país para dar prioridad a nuestras familias más vulnerables».
Estas declaraciones se dan mientras las protestas continúan y se esparcen a través de regiones. Desde transportistas hasta agricultores, el gobierno enfrenta una grave crisis. Luego de que la semana pasada el presidente Castillo declare que los manifestantes eran personas “pagadas” y “vendidas”, ahora apela a la retórica desgastada del “maestro como presidente”.
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Desde el corazón del conflicto
“Queremos la presencia del presidente porque él ha ofendido al pueblo diciendo que somos vagos, delincuentes y pagados. No es así señores. El pueblo no está pagado, el pueblo se levantando porque él está abusando. ¿Por qué no viene a Huancayo? “. Estas declaraciones provienen de un manifestante en Huancayo que, como muchos otros ciudadanos en su derecho legítimo a la protesta, clama por la presencia del mandatario.
Vale recalcar que hasta el momento el presidente no ha demostrado intención alguna en trasladarse a Huancayo en vías de solucionar la crisis que enfrenta su gobierno. Mientras se suscitan actos vandálicos y saqueos frente a la intensificación de la crisis, el Ejecutivo ha preferido continuar con sus actividades regulares desde Lima. La desconexión entre el gobierno y la población es cada día más notoria.