La bancada de Unión por el Perú, conformada por seguidores del delincuente Antauro Humala, presentó un proyecto de ley que busca convocar a una asamblea constituyente que se encargue de elaborar una nueva constitución que reemplace a la Carta de 1993.
El proyecto de ley está firmado por los legisladores Rubén Ramos, Javier Mendoza, Jim Mamani, Mariá Bartolo y Edgar Alarcón. La iniciativa señala que la Carta Magna fue elaborada en un periodo alejado por la democracia y, por ello, la población quiere un cambio de la misma.
«Ha sido un clamor permanente la reforma total de la Constitución, puesto que no ha nacido de la voluntad del pueblo y su designación como Constituyente ha sido impuesta por circunstancias alejadas a la democracia», reza el documento.
Asimismo, el documento señala que acciones como el ‘Andahuaylazo’, motín encabezado por el ahora preso Antauro Humala que dejó a 4 policías muertos en Apurimac, corresponden a una «lucha por el restablecimiento de la Constitución de 1979 y la convocatoria de una Asamblea Constituyente».
Además, el proyecto de ley señala que las constituciones que ha tenido el Perú «han servido para tener un país criollo y sometido a los imperios, primero de Madrid y ahora de Washington» y, por lo tanto, su visión de «un nuevo país» se inicia por la imposición del «etnonacionalismo».
Al respecto, Javier Mendoza Marquina, legislador de UPP, indicó que «no podemos reconocer como legítima la Constitución del 93, pues es producto de una dictadura y ha demostrado ser un instrumento para empobrecer al pueblo y enriquecer a los que más tienen».
Cabe precisar que la declaración de Mendoza Marquina es falsa, puesto que desde la promulgación de la Constitución Política del Perú de 1993 los índices de pobreza se han reducido. En 2001, la población en estado de pobreza ascendía al 54.8%, cifra que se ha reducido a 20.5% en 2018.