Cuando se habla de jugadores africanos, uno de los primeros nombres que se nos vienen a la mente es, sin duda alguna, el de Didier Drogba. Hace 43 años nacía en Costa de Marfil, el hombre que años más tarde sería considerado, tanto en el Chelsea como en el equipo de su ciudad natal, el mejor jugador de la historia. Por ese motivo, para celebrar su onomástico, Diario El Gobierno te trae un recuento de los momentos más destacados del ariete marfileño.
Conquistando Francia
El club que le permitió a Drogba empezar a ser conocido en Europa, fue el Olympique de Marsella. Con el cuadro francés, anotó 19 dianas durante la temporada 2003-2004. Números por los que fue elegido el jugador del año de la liga. Así mismo, convirtió 5 goles en la Champions League y 6 en la Copa de la UEFA. No por nada, uno de los equipos más grandes de Inglaterra llegó a pagar 24 millones de euros para sumarlo a sus filas.
Blue is the color
No hay otra palabra que los aficionados del Chelsea usen para referirse a Drogba, más que «ídolo». En su primera temporada, salió campeón de la Premier League, luego de 50 años de sequía. De igual forma, conquistó la Football League Cup y dijo presente en la final anotando el gol del triunfo frente al Liverpool.
Siguió destacando en sus siguientes temporadas con el cuadro de la capital inglesa. A lo largo de su instancia, logró conseguir 4 Premier Leagues, 3 Copas FA, 2 Comunity Shield y 2 Copas de la Liga. De igual manera, fue goleador dos veces de la liga, y fue incluido en el equipo de la década de la Premier League en el 2012.
Aunque se marchó del Chelsea en el año 2012, luego de un paso por el Shangái Shenua y Galatasaray, regresó para vestirse de azul y jugar su última temporada en el 2015. De hecho, en el último partido, disputado en el Stamford Bridge, sus compañeros lo llevaron cargado hasta la mitad de la cancha para efectuar su cambio. Dicha ceremonia fue acompañada por una ovación total del estadio que despedía y agradecía a su máximo ídolo.
Un cabezazo de copa
Esta hazaña merece un capítulo aparte. Se disputaba la final de la Champions del año 2012, y el Bayern iba ganando 1-0. Faltaban solo cinco minutos para que termine el partido, pero un córner para el Chelsea lo cambiaría todo. 88′ en el reloj, y aparece él. Un salto brutal para ganarle la posición a Boateng, y un gesto técnico exquisito para impactar el balón con la frente y reventarle el arco a Neue, quien por más que intentó poner la mano, no pudo contra la potencia del cabezazo. Locura total en el estadio que celebraba el empate transitorio de los de Londres.
Se jugó el tiempo suplementario y la paridad continuaba. Tanda de penales. Empezó mal para el Chelsea, pero Petr Cech y un remate al palo de Schweinsteiger le permitieron llegar con la chance para definir en el último tiro desde los 12 pasos. ¿El encargado? Drogba, que la mandó al palo derecho del arquero y le daba a los suyos el título de la Champions.
Capitán dentro y fuera de la cancha
Con su país, Drogba disputó tres copas del mundo. Anotó el primer gol de la historia de Costa de Marfil en los mundiales de Alemania 2006. Participó, también, de la Copa Africana de Naciones, donde salió subcampeón en dos ocasiones. Era referente y capitán indiscutible de su selección.
Su mayor logro, sin embargo, no fue dentro de una cancha. Pues, tras clasificarse al mundial 2006, Drogba hizo una petición especial a los grupos rebeldes de Costa de Marfil para que den alto al fuego. Dicha petición fue aceptada. Así, se puso fin a cinco años de guerra civil. El hombre unificó un país a través del fútbol y contribuyó activamente con la paz en su nación. Tanto fue el impacto, que en el año 2010, el delantero fue elegido como una de las 100 personas más influyentes por la revista Time.