El regreso de Iván Rakitic al club que lo tuvo 5 años después de haber sido transferido por los «sevillistas» hace unas semanas, así como el posible debut del nuevo refuerzo del club azulgrana, Sergiño Dest, eran solo algunos de los atractivos del partido de hoy. El equipo dirigido por Ronald Koeman tenía una dura prueba después de haber ganado de forma convincente sus primeros dos partidos, ante el Villarreal y el Celta de Vigo, este último jugando toda la segunda parte con uno menos. En cambio, el Sevilla venía de dos victorias agónicas, pero mostrando un buen fútbol de la mano de Julen Lopetegui.
Con solo 8 minutos jugados y una larga posesión de balón, el Sevilla llegó anotar a través de Luuk De Jong tras un córner. No tuvieron tiempo ni de acomodarse y el Barcelona empató tan solo 2 minutos después. Un pase a profundidad de Lionel Messi a Jordi Alba, pero que fue interceptado y mal rechazado por el futbolista Jesús Navas. Coutinho aprovechó el error para meter su primer gol del campeonato y concretar el 1-1, celebrando con el balón bajo la camiseta, ya que espera su tercer hijo.
El segundo tiempo fue más de lo mismo: el local buscando la manera en cómo quebrar la paridad, mientras que la visita se refugiaba en su área para poder contraatacar. Jordi Alba, quien tenía un gran desgaste físico, sintió un tirón y tuvo que ser atendido a los 75′. Los últimos 10′ el partido estuvo muy friccionado y hacía presagiar que cualquiera de los dos equipos podría descontar. El momento de más tensión llego a los 92′ cuando Lionel Messi fue derribado en el área rival. No obstante, el juez principal decidió no cobrar penal, ya que no intuyó que era una infracción.
Los dos equipos comparten el quinto lugar de LaLiga con 7 unidades. Por otra parte, el Real Madrid lidera la tabla de posiciones con 10 puntos.